La Real Sociedad visita el Estadio de Gran Canaria en pleno estado de euforia. En una temporada donde las cosas no han ido saliendo como se deseaba, los de San Sebastián llegan a este partido después de disputar los que muchos consideran los mejores noventa minutos del curso.

Su rival, la UD Las Palmas tampoco ha tenido la temporada esperada, pero su problema es mucho más grave. Desde la isla canaria se ve demasiado cerca el precipicio del descenso. Los amarillos no consiguen un equilibrio que les de un equipo sólido y reciben muchos goles y anotan muy pocos.

Para ser más precisos: es el conjunto más goleado junto al Deportivo de la Coruña, con 63 tantos encajados. Y además se sitúa como el segundo que menos goles mete, habiendo materializado 22.

Sin respuesta de los fichajes

La Unión Deportiva Las Palmas perdió el pasado verano a Roque Mesa, a Boateng y a Jesé Rodríguez. Tres jugadores importantes, sobre todo los dos primeros, que han supuesto un vacío imposible de cubrir por las nuevas incorporaciones del conjunto amarillo.

Si a ello se le suman las salidas de Jonathan Viera y de Mauricio Lemos durante el pasado mercado invernal, pues se podría decir que el equipo se ha quedado descompuesto.

"Es para que nos echaran a tomar por culo a todos" declaró hace poco Paco Jémez, dando una clara muestra de que el equipo está hundido

En el capítulo de altas llegaron futbolistas experimentados y otros con menos experiencia pero a priori con futuro. En el primer caso estaría Alberto Aquillani, el ex del Liverpool y el AC Milán. Llegó para suplir a Roque Mesa, pero la sombre de este es demasiado alargada. Luego, los Nacho Gil (llegó en calidad de cedido desde el Valencia CF) o Calleri no han dado lo que se esperaba de ellos.

Además de los fichajes, jugadores como Tana, Vicente Gómez o Alen Halilovic no han aparecido. Por ellos pasaba en gran parte dar el paso y salvar la categoría.

Racha negativa

Los insulares llevan nueve partidos consecutivos sin conocer la victoria, exactamente desde la jornada 22, cuando se impuso por un gol a cero al Málaga CF. Tras ello, cuatro empates y cinco derrotas, o lo que es lo mismo, cuatro puntos de veintisiete posibles.

Después de esto la situación se ha puesto muy cuesta arriba, siendo casi una utopía pensar en la salvación. La importancia del encuentro para los de Paco Jémez es vital y de ahí su dificultad. Si la isla quiere ver fútbol de Primera División la próxima temporada, hay que ganarlo prácticamente todo.