A falta de cinco jornadas para el final de la Liga Santander, la UD Las Palmas lo tiene prácticamente imposible para conseguir salvar la categoría. Solo un milagro, ganar lo que queda y que lo pierda todo el Levante, son las únicas opciones que le quedan al equipo amarillo. Con la victoria del Levante contra Málaga y la derrota de los canarios en el Benito Villamarín, el equipo amarillo aumenta su distancia con el equipo granota a 13 puntos, y restando 15 puntos, se antoja toda una utopía la permanencia.

Los amarillos saltaban al campo con un once con caras nuevas, pero con la idea de llevarse los tres puntos a casa y recortar distancias. Con un inicio ilusionante, Las Palmas empezó dominando el encuentro con posesión pero sin llegadas claras al área. Sin embargo, desde el minuto 20, el asedio del cuadro verdiblanco sobre la portería que hoy defendía el guardameta canario, Raúl Lizoain, era constante. El cancerbero amarillo se iba a convertir el mejor de los suyos con una gran actuación y manteniendo la portería a cero al descanso.

La pesadilla amarilla durante toda la primera parte era un desafortunado, de cara a gol, Sergio León. El delantero cordobés tuvo claras ocasiones para adelantar a su equipo en el marcador, pero se topaba con un Raúl inspirado en la meta amarilla.

Sin pólvora arriba

Durante la segunda parte, el partido se abrió para los dos lados. El Betis dejaba huecos entre líneas y perdía balones en la zona media del terreno de juego. A pesar de las facilidades del equipo bético, la UD Las Palmas se desinflaba al llegar al área grande sin generar peligro arriba.

Jonathan Calleri casi no olió el balón en toda la segunda mitad, y Halilovic no conectaba con Nacho Gil, ni con Aquilani. Los cambios refrescaron el centro del campo de la UD, pero solo le sirvió para mantener el marcador de 0-0, porque los amarillos no realizaron ninguna llegada al área verdiblanca en los segundos 45 minutos

El entrenado bético, Quique Setién, realizaba cambios muy ofensivos para seguir manteniendo el acoso en la portería canaria. Durante los 90 minutos, los jugadores béticos no fueron capaces de batir al cuadro dirigido por Paco Jémez aun teniendo un sinfín de ocasiones claras.

Final cruel

En el descuento, llegaban los goles. Un centro medido de Barragán, en el minuto 93, le dejaba en bandeja a Junior, que a placer, batía la portería amarilla, defendida por Raúl Lizoain, con un gran testarazo de cabeza. La defensa amarilla inmóvil, poco pudo hacer ante la respuesta rápida del cantera verdiblanco. El árbitro había marcado cinco minutos de añadido, y con el gol, el equipo canario estaba tocado y hundido. Un duro golpe después de estar más de 90 minutos intentando, al menos, arañar un punto de un campo muy difícil.

Como las noticias no vienen solas, también en el partido que enfrentaba el Levante UD contra el Málaga CF, en el minuto de descuento, el equipo valenciano rompía el empate del marcador con un gol que certificaba prácticamente su permanencia en Primera División.

El descenso casi sentenciado

Con el Málaga matemáticamente equipo de Segunda. La próxima jornada, la UD Las Palmas puede certificar definitivamente su descenso. Solo faltaría cubrir una plaza en la que, el Deportivo de la Coruña, se resiste a ocupar. El equipo gallego está a siete puntos de la salvación gracias a la buena racha que vive con dos victorias consecutivas, que le han servido para volver a creer.

En condiciones normales, el Levante es el candidato para seguir manteniéndose un año más en la división más alta del fútbol español.