Tras un año extraño y excesivamente convulso, el Extremadura ha logrado en estas dos últimas jornadas lo que parecía imposible: meter a todos en el barco. El "efecto Sabas" ha supuesto una auténtica e inmediata revolución y, a día de hoy, la sintonía con la que afición, club y plantilla encaran las eliminatorias de ascenso es idónea. Ilusión, optimismo y unas sensaciones que recuerdan en exceso a las del equipo que el curso pasado logró la gesta de la salvación.

Una vez conseguido el objetivo de entrar en liguilla, la primera de su historia, la premisa es disfrutar y seguir en la línea ascendente trazada durante las últimas semanas. El club que, junto al Cornellà, menos puntos ha logrado de todos los que disputarán playoff tiene también una de las plantillas más potentes de la categoría. Un equipo capaz de lo mejor y lo peor cuyas posibilidades son una auténtica incógnita.

Álex Barrera y Urko Arroyo pugnando por el esférico. Fuente: UCAM Murcia CF.
Álex Barrera y Urko Arroyo pugnando por el esférico. Fuente: UCAM Murcia CF.

El enorme potencial de la plantilla, aunque parezca increíble, en muchos tramos de la temporada ha supuesto un hándicap. Muchas y muy altas fueron las expectativas creadas en torno al equipo el pasado verano y la respuesta no siempre ha sido todo lo positivo que la afición y la directiva desease. Por ello, durante el transcurso de la misma han sido cuatro los técnicos que se han sentado en el banquillo de Almendralejo, aunque se han realizado cinco cambios. Juan Sabas por dos ocasiones, Agustín Izquierdo, Manolo Ruiz y Martín Vázquez han vivido en sus propias carnes la presión de tener que aspirar a lo máximo por la inversión realizada. 

Baile de entrenadores

En verano, en plena preparación física y técnica de la campaña y sin haberse disputado ningún encuentro oficial, la entidad comunicó la rescisión del contrato de Juan Sabas, entrenador que había logrado el milagro meses antes consiguiendo la salvación, sobreponiéndose a una situación bastante crítica. Agustín Izquierdo inició el curso, pero siguió el mismo camino que su antecesor tras un inicio titubeante. A mediados del mes de octubre, tras empatar con el filial de Las Palmas en casa fue despedido, a pesar de estar con los mismos puntos que el playoff y teniendo el liderato a una distancia de tan solo una victoria.

Fue sustituido por Manolo Ruiz, el cual consiguió que su bloque finalizara la primera vuelta a gran nivel, goleando a Badajoz, Mérida y Betis B. El 2018 arrancó con victoria continuando con la dinámica ascendente que arrastraba el conjunto de Almendralejo antes del parón navideño, pero rápidamente los malos resultados y las peores sensaciones hicieron acto de presencia y esto dilapidó el trabajo del técnico jerezano, que ni la goleada al Écija en casa (4-0) le sirvió para mantener su puesto. 

Martín Vázquez dando indicaciones. Foto: El Periodico de Extremadura.
Martín Vázquez dando indicaciones. Foto: El Periódico de Extremadura.

Sorprendente fue la decisión después de esa contundente victoria y no menos la elección del nuevo técnico: Rafael Martín Vázquez, integrante, como jugador, de la famosa 'Quinta del Buitre' del Real Madrid. Desde la directiva azulgrana intentaron dar un golpe de efecto con esta elección, pero no lo consiguieron porque los números señalan que el Extremadura ha sido uno de los peores conjuntos del Grupo IV en la segunda vuelta, en muchas ocasiones lastrado por las bajas en defensa, ya que Aitor y Pardo sufrieron sendas lesiones y Borja fue sancionado con cuatro partidos. Martín Vázquez, que no atesoraba experiencia alguna en los banquillos, tan solo logró 11 puntos de 30 posibles, por lo que fue cesado después de la derrota en el Nuevo Vivero de Badajoz

Déjà vu Sabas

Suena bastante surrealista, pero en ocasiones el fútbol lo es. El madrileño Juan Sabas, entrenador salvador la temporada pasada manteniendo la categoría tras una recta final espectacular y que fue cesado antes de que diera el pistoletazo de salida la campaña actual, es el hombre al que recurren desde la entidad azulgrana para clasificar al equipo para el playoff y, posteriormente, alcanzar el ascenso. El primer objetivo ya está conseguido tras vencer al Mérida en el Romano (0-2) y golear al Betis B en casa (5-0) devolviéndole la fe al vestuario y a la afición de que la temporada puede finalizar con un hito histórico en caso de realizar una gran promoción de ascenso.
 

Referencia: Enric Gallego

Tan sólo 13 partidos le han bastado al delantero catalán para convertirse en la referencia ofensiva del equipo y uno de los jugadores más valorados por el Francisco de la Hera. Lucha, presencia, entrega y un talento natural para hacer gol y crear peligro componen las credenciales que le convierten en un delantero "temible".

Tras varias temporadas como hombre gol en las filas del Cornellà del Grupo III, la campaña 17/18 ha sido la de su explosión. La primera vuelta del catalán se cerraba con la friolera de 18 goles en 19 partidos, lo  que le convertía en uno de los nombres propios de la categoría y en auténtico objeto de deseo para numerosos equipos.

El Extremadura tomaba la delantera y Enric llegaba en el mercado invernal con la vitola de máximo goleador nacional. Su aportación al club azulgrana no se haría esperar y debutaba frente al  Córdoba B "destrozando" todas las expectativas. El catalán entraba en el minuto 57 sustituyendo a Airam Cabrera y en tan sólo ocho minutos, anotaba un espectacular hat trick, argumentando con creces su enorme valía de cara a puerta.

Una semana después se veía obligado a parar durante cuatro jornadas, debido a una lesión. A su vuelta se convertía en el principal recurso ofensivo de los de Almendralejo, con más de mil minutos disputados y diez goles en su haber. Enric no sólo anota, sino que asiste, recupera, genera y todo lo que hace lo hace con criterio. Un nueve muy completo y un auténtico "killer" que, a buen seguro, seguirá demostrando sus cualidades en las eliminatorias de ascenso.


Análisis táctico

Tras el baile de banquillos a lo largo de la temporada, es muy complicado establecer un análisis genérico en lo que a aspectos tácticos se refiere. Sin embargo, sí que es cierto que ha habido un esquema "base" con todos los entrenadores y que coincide en varios aspectos con el actual de Juan Sabas.

El Extremadura elabora un fútbol práctico, muy acorde con los patrones de fútbol desplegados en una categoría tan peculiar como ésta. Un equipo sólido, rocoso, que no asume riesgos innecesarios y cuyas virtudes comienzan por el buen hacer de su zaga. La pareja de centrales más utilizada a lo largo del campeonato y que más éxitos ha dado ha sido la compuesta por Pardo y Borja García. Dos defensores contundentes y con buen desplazamiento en largo.

Foto: Alberto Lorite, Extremadura UD.
Foto: Alberto Lorite, Extremadura UD.

En el centro del campo suele formar con doble pivote y se caracteriza por efectuar transiciones rápidas, tratando de aprovechar en todo momento la velocidad de sus extremos. Esta es, quizá, una de las mayores fortalezas del conjunto azulgrana: su verticalidad. Los de Almendralejo cuentan con dos balas como son Jairo y Valverde, cuya incansable movilidad en zona de tres cuartos da más de un quebradero de cabeza a sus rivales.

Las referencias ofensivas suelen ser Kike Márquez y el goleador Enric Gallego. El gaditano, responsable de la faceta creativa, ha logrado sus mejores números jugando por detrás del punta. Su buena capacidad de asociación y su facilidad para el último pase hacen del de Sanlúcar una amenaza constante.

En el último encuentro de liga,  Juan Sabas desplazó a Kike Márquez en banda y metió a Airam Cabrera como segundo delantero, obteniendo un excelente resultado. El madrileño ha mostrado dos esquemas ofensivos diferentes en dos jornadas, por lo que su disposición táctica de cara a playoffs es, de momento, una incógnita.

Con las dificultades que entraña definir un once tipo en una plantilla con tantas alternativas, una aproximación al equipo titular podría ser: Manu García en la portería; Álex Díez, Pardo, Borja García y Aitor en la zaga; Jairo, Zarfino, Álex Barrera y Valverde en el centro del campo y Kike Márquez por detrás de Enric Gallego en punta.

Uno a uno

Manu García: se ha ganado a golpe de "paradones" el cariño y respeto de la grada azulgrana. Muy seguro, ha salvado los muebles en muchos encuentros. Titular indiscutible.

Álex Díez: lateral joven de gran recorrido y proyección ofensiva, ha ido de menos a más a lo largo de la campaña hasta ganarse la titularidad. Poco a poco va mostrando su potencial.

Aitor: el asturiano es uno de los capitanes e ídolos del Francisco de la Hera. Sobrio, contundente y muy regular. Una lesión le ha tenido apartado durante gran parte de la segunda vuelta, pero parece recuperar su mejor nivel.

Pardo: mediocentro reconvertido a central. Uno de los mejores jugadores de la plantilla. Tras completar una espectacular primera vuelta, una lesión le ha tenido apartado varios meses. Su estado físico es la gran duda para los playoffs.

Borja García: central titular desde su llegada en junio. Corpulencia, regularidad e intensidad le definen. Muy metido durante los noventa minutos, forma junto a Pardo una de las mejores parejas del grupo.

Candelas: lateral muy rápido y con mucha proyección ofensiva. Titular indiscutible durante gran parte de la temporada, el tremendo desgaste y los cambios en la zaga le han pasado factura durante las últimas semanas.

Nico Delmonte: llegó en el mercado invernal. Central contundente, con buen desplazamiento en largo. Se ha mostrado irregular en los partidos que ha intervenido.

Fran Miranda: jugador muy físico y corpulento que ha alternado las posiciones de pivote defensivo y central. Muy sobrio durante la primera vuelta, en la segunda se ha mostrado muy irregular.

Zarfino: típico pivote defensivo destructor. El uruguayo es un trabajador incansable y hace gala en cada encuentro de la denominada "garra charrúa". Muy potente y excesivamente duro en ocasiones, aporta el equilibrio necesario en la medular.

Álex Barrera: centrocampista de corte defensivo. Su gran físico y trabajo "en la sombra" le han ido proporcionando minutos hasta convertirse en uno de los hombres importantes de la plantilla. 

Jesús Rubio: el mejor jugador extremeño de la pasada campaña no ha tenido su año. Talento a raudales y uno de los fichajes del verano, comenzó muy bien la temporada pero, tras una lesión, no ha vuelto a responder a las expectativas.

Kike Márquez: el gaditano puede actuar como extremo y como segunda punta. Dueño del balón parado, se sirve de su clase descomunal para asistir, anotar y moverse como pez en el agua en zona de 3/4. Referencia en ataque, máximo goleador del equipo y uno de los mejores jugadores del grupo.

Jairo: el canario es un extremo veloz, habilidoso y muy trabajador. Uno de los futbolistas más en forma de la plantilla y un puñal por la banda. Imprescindible su aportación ofensiva a lo largo del curso.

Valverde: la otra "bala" de la plantilla. Extremo muy veloz a la vieja usanza que no ha gozado de todos los minutos que se esperaba. Con confianza, puede llegar a ser un jugador decisivo de cara a playoffs.

José García: llegó en el mercado invernal y no ha contado con muchas oportunidades. Jugador muy técnico, habilidoso y versátil, ya que puede jugar tanto de lateral como en cualquier posición de ataque.

Willy: el gran capitán azulgrana. Luchador intenso e inagotable, representa a la perfección los valores del club. Es el tercer máximo goleador del equipo. Le han intervenido recientemente de la rodilla, aunque se espera pueda llegar a tiempo para los playoffs.

Airam Cabrera: el delantero llegó para ser titular indiscutible, pero su rendimiento ha estado infinitamente por debajo de las expectativas levantadas. Con uno de los mejores carteles de la categoría, si Sabas le recupera puede ser muy importante de cara a la liguilla.

Enric Gallego: la referencia en punta del Extremadura y su hombre-gol. Con 28 goles es el máximo goleador de la categoría. Una auténtica bestia que lucha, marca y asiste, capaz de sacar petróleo de la nada. Muy a tener en cuenta en estas eliminatorias.

Curro Harillo: tan sólo ha disputado un encuentro por lesión de Manu García. Bastante seguro, se le augura gran proyección.

Lomotey: ha intervenido poco. Central por necesidad,  le tocó suplir las ausencias en defensa durante envites muy complicados y el canterano cumplió, dejando un buen sabor de boca.

Peralta: extremo muy joven y habilidoso. Martín Vázquez le dio la oportunidad de debutar en abril y cumplió. Le faltan tablas, pero puede ser interesante en un futuro.