Los de Fran Fernández salieron valientes al terreno de juego aunque pronto el Alcorcón consiguió imponer sus galones y su condición de local a los visitantes. El partido no caía del lado de nadie, aunque daba la sensación de que eran los que vestían de amarillo los que más enchufados entraban en los primeros minutos. La Agrupación Deportiva lo intentaba por medio de internadas de Nono por banda o de balones a la espalda de los defensas para Jonathan Pereira, como una ocasión a los 15 segundos donde el delantero vigués echó fuera el balón en un mano a mano, pero los almerienses se encontraban muy bien plantados en el terreno de juego impidiendo el avance del ataque alfarero.

Muestra de estos intentos es la ocasión de la que gozó Sangalli en el minuto 19, en el que una gran conducción de Nono a la contra dio lugar a un centro rechazado al que el jugador vasco no pudo darle suficiente fuerza para sorprender a René. El Alcorcón se encontraba en sus mejores minutos de la segunda parte, en los que tenía entre ceja y ceja el arco almeriense, y así es como llegó una de las más claras del partido, donde Gavilán, que acababa de sustituir al lesionado Laure, recibió en zona de tres cuartos y tras conducir el balón cruzó demasiado frente al cancerbero rojiblanco.

Juan Carlos fue la brújula del equipo en ataque | Fuente: La Liga
Juan Carlos fue la brújula del equipo en ataque | Fuente: La Liga

Es entonces cuando los pupilos de Fran comenzaron a despertar y empezaron a retener el balón y jugarlo con más criterio y cuando lo perdían buscaban una rápida recuperación. El despertar del Almería se hizo notar en el minuto 40, cuando Luis Rioja, que fue el mejor del partido, le robó el balón a Burgos tras un mal control de éste y tras recortar, disparó desviado por muy poco. Los madrileños se vinieron abajo y es entonces cuando los indálicos olieron la sangre y aprovecharon para intentar anotar un tanto. En el 42 se dio una jugada más propia de una comedia que de un partido de fútbol, donde De la Hoz recibió el balón tras un robo y solo frente al portero la pasó a Corpas, cuyo disparo se topó con Dani Jiménez. El rechace de este disparo lo cogería Romera que volvería a estrellar el disparo en el meta sevillano y Juan Carlos lo recogería y le haría un pase al hueco para Álvaro Giménez, cuyo remate estando solo frente al arquero alcorconero se paseó llorando por la línea de gol y Romera no acertó a empujarla. Finalmente, Corpas, sin portero, al rematar el balón de Álvaro se topó con un defensa que vestía de amarillo y el balón se fue a córner. Con esta ocasión terminaba una primera parte equilibrada y llena de protagonismo para el centro del campo de ambos conjuntos.

Ya en la segunda parte el Almería salió más activo que su rival, y eso se vio reflejado con una ocasión en la que Álvaro Giménez salvaría un balón en la esquina del campo y lo serviría en un pase que Romera aprovecharía para zafarse primero de un defensa y luego de otro con un caño para disparar al lateral de la red. El Alcorcón no fue capaz de superar el entramado defensivo propuesto por los andaluces en el partido en Santo Domingo, aunque si se puede destacar una jugada aislada de Nono, que fue el que más lo intentó junto a Jonathan Pereira, donde el pacense encaró por banda, se dejó el balón atrás y disparó desde lejos echando el balón poco por encima del arco defendido por René.

El Almería hizo un partidazo en defensa | Fuente: La Liga
El Almería hizo un partidazo en defensa | Fuente: La Liga

A raíz de esta ocasión el Alcorcón quiso llevar la iniciativa, pero el partido estaba roto y ninguno de los dos equipos fue capaz de atar de manera definitiva el encuentro. En el Alcorcón entraría Casadesús por Juan Muñoz y en el Almería Narváez por Corpas. Estos cambios desestabilizarían a las defensas rivales ya que Casadesús transmitiría un gran peligro con su presencia en el área tras el aumento de centros laterales y Narváez desequilibrando con sus internadas desde la banda al centro y con sus cambios de ritmo. Sin embargo, no habría ningún disparo hasta el final del partido que entrañase peligro para los arqueros de ambos equipos a excepción de una de las jugadas más claras del partido, donde Narváez se zafaría de todo el que quiso y desde bastante lejos chutó obligando a Dani Jiménez a lanzarse abajo, y el rechace le caería a Luis Rioja, que viniendo en carrera remataría raso con su pierna buena haciendo que el meta del Alcorcón se convirtiese en el mejor jugador de su equipo salvando el disparo con el pie.

El partido terminó en empate tras un intercambio de ocasiones, presión de ambos equipos, jugadas enmarañadas en el centro del campo, destellos de calidad individual y buen hacer defensivo de ambos conjuntos, donde René y Dani Jiménez fueron vitales en sus equipos, Ibiza y Burgos fueron auténticos muros en defensa, Eteki y Eddy Silvestre los dueños del centro del campo y Luis Rioja y Nono los mejores atacantes del encuentro.

El once titular frente al Alcorcón | Fuente: La Liga
El once titular frente al Alcorcón | Fuente: La Liga