Imprescindible para entender la filosofía que emana de la cantera. El hilo conductor necesario que permite la coherencia que desarrolla el más fiel y puro ADN Barça. El protagonista principal sobre el que se alza el telón de La Masía. Es Sergi Milà, la brújula perfecta.

Bajo su batuta ha logrado perfeccionar la impecable sinfonía de jugadores como Sergi Samper y Carles Aleñá, acompañando al primer equipo; Alex Carbonell o Adrià Vilanova, piezas fundamentales en la cantera azulgrana, o los colosos Dani Morer y Ferran Sarsanedas, ejes incuestionables en el Barça B. Su docencia, impoluta desde su aterrizaje a La Masía, penetra con suma exquisitez en los miles de jóvenes que se nutren con sus enseñanzas.

Sergi Milà dirigiendo el FCB Cadete B este curso / Foto: Noelia Déniz (VAVEL)

Embrujado por el deporte rey, Sergi Milà daba sus primeros pasos con el esférico pegado a sus pies al compás de los benjamines de la UE Sants, dónde lograría debutar con el primer equipo bajo las órdenes de Pep Marguí. Insaciable y ambicioso, iniciaba además en 2001 su formación como entrenador en la FCB Escola, al mismo tiempo que trazaba sus mejores jugadas sobre el verde. Impecable labor que desarrollaría durante los 13 años de defensa acérrima de la zamarra verdiblanca.  

Recorrido profesional

Sus cinco años en la FCB Escola, compaginando la experiencia de cabalgar como segundo de a bordo de Juan Carlos Bueno con la UE Sants la temporada 2005/2006, llevaron a Sergi Milà a comandar el timón del FCB Benjamín A durante dos campañas (2006/2007 y 2007/2008). Tres cursos con el FCB Alevín A (2008/2009 a 2010/2001), uno al mando del FCB Benjamín B (2011/2012) y el regreso de nuevo al FCB Benjamín A tres temporadas más (2012/2013 a 2014/2015) alzaron el crecimiento del técnico, dónde su doctrina no pasaría inadvertida.

Sería precisamente en 2015 dónde alcanzaría un hito memorable: más de 200 partidos consecutivos sin conocer la derrota en Liga, o, lo que es lo mismo, ocho temporadas consecutivas sin claudicar en el campeonato doméstico. Una efeméride para la historia.

Milà en su primera temporada con el FCB Cadete B / Foto: Noelia Déniz (VAVEL)

Su buen hacer, y su incansable labor en La Masía le otorgaron el mando de la nave del FCB Infantil B durante dos cursos (2015/2016 y 2016/2017), logrando la World Challenge Cup de Japón en 2016 tras vencer al Omiya Ardija con un solitario gol de Xavi Planas. Allí, el encomiable gesto de sus jugadores consolando al rival impactaría con fuerza en el mundo del deporte, ganando el Premio Laureus al ‘Mejor Momento Deportivo del Año’.

Su obra, inmaculada en su trayectoria con el FCB Infantil B, le permitió coronarse con LaLiga Promises tanto en 2015 en Miami como en 2016 en Tenerife.

Sergi con el FCB Infantil B en Japón (2006) / Foto: FC Barcelona

 

Milà, con el sueño de revalidar el título

Con la marcha de Cristian Catena en los banquillos del FCB Cadete B tras conquistar las últimas tres Ligas, Sergi Milà tomaba las riendas del escuadrón la temporada 2017/2018, respondiendo a la perfección con una Liga impoluta en su primer curso capitaneando al FCB Cadete B. En su segunda temporada al frente del escuadrón, el míster catalán persigue el sueño de revalidar el trofeo de la regularidad a falta de diez jornadas para el cierre de la competición.

Su aterrizaje a la FCBEscola en 2001 le permite erguirse como uno de los entrenadores más longevos de La Masía junto con García Pimienta, con la diferencia de que Sergi Milà puede presumir de hilar un total de 18 años consecutivos entrenando de manera ininterrumpida en la cantera azulgrana, pues ‘Pimi’ se ausentaba de los banquillos un par de temporadas.

Siempre como principal capitán del navío, a excepción de una temporada con el FCB Alevín A ejerciendo como segundo entrenador, la filosofía de Sergi Milà queda impregnada a fuego en cada pizarra.

Sergi Milà en el banquillo del FCB Cadete B este curso / Foto: Noelia Déniz (VAVEL)

Artífice de uno de los mejores momentos de la cantera, sus cualidades en la banca le aúpan como uno de los entrenadores más respetados de La Masía. Incuestionable en su laboriosa tarea de exprimir el jugo de sus jugadores, Sergi Milà sigue caminando con las aptitudes de un líder hacia un futuro teñido de azulgrana.