Miguel Olavide fue una de las novedades en la alineación de Jagoba Arrasate del pasado sábado frente al Nàstic. El canterano rojillo aprovechó las diferentes bajas que presentaba Osasuna para poder hacerse un hueco en el once de la pasada jornada. Un puesto que hacía mucho que no ocupaba. En su paso este viernes por la sala de prensa de Tajonar, fue preguntado por este tema, entre otros más de la actualidad rojilla.

El joven jugador de Osasuna comenzó destacando que, a pesar de llevar bastante tiempo sin jugar, él se sentía con la mente tranquila y trabajando duro de cara a poder estar preparado por si surgía la oportunidad. También argumentó que la temporada es larga y que él hacía tiempo que esperaba poder demostrar que estaba preparado para rendir si el míster así lo decidía, como pasó la jornada anterior. Así mismo, Olavide manifestó haberse sentido cómodo durante el partido, y haber salido con confianza del mismo, con la esperanza de que el técnico rojillo pueda volver a contar con él pronto.

Preguntado sobre si hay alguna clave en el método de Arrasate para tener a todos los jugadores tan enchufados, el centrocampista de Osasuna destacó el ambiente que se respira dentro del vestuario, donde dice hay “la sensación de ser una temporada ilusionante”, y que eso genera que todo el mundo esté enchufado y quiera aportar en un año que califica como “muy bonito”.

Centrándose ya en el partido de este próximo lunes frente al Málaga, Olavide dijo esperar un partido difícil, en un campo muy bonito con un ambiente especial, entre dos equipos de la parte alta que se juegan mucho, donde “podríamos dar un paso hacia adelante”, refiriéndose al hecho de la posibilidad de dejar a siete puntos al equipo andaluz, uno de los principales rivales de los rojillos en la pelea por el ascenso.