Si el Madrid tuviese que pedir un deseo, seguramente sería terminar la temporada cuanto antes. La eliminación en Copa del Rey por el Barcelona, la imposibilidad de luchar por la Liga debido a los doce puntos que le separan del líder y el desastre en la Liga de Campeones a manos del Ajax, son algunos de los chacos que se ha llevado el Madrid en menos de una semana y, a esto, se ha unido también las lesiones.

Zinedine Zidane dirigió su primer entrenamiento el pasado miércoles, tras la destitución de Santiago Solari, donde contó con las ausencias de varios jugadores que continúan con sus procesos de recuperación.

El primero en caer fue Marcos Llorente en la ida de semifinales de la Copa del Rey contra los azulgranas en el Camp Nou. El dorsal 18 recayó de su lesión muscular en el aductor de la pierna izquierda lo que le tiene más de un mes apartado de los terrenos de juego y aunque ya lo hemos podido ver entrenándose en solitario en el césped de Valdebebas no llegará para el próximo encuentro contra el Celta.

Asimismo, en partido de vuelta de la Champions League, aparte de llevarse por delante a los de Solari, se llevó también a Lucas Vázquez, Vinicius y Dani Carvajal. El brasileño ha sido el peor parado, ya que estará en torno a los dos meses de baja por una rotura de ligamentos de la articulación tibioperonea de la pierna derecha. A él, se le suma Carvajal con una rotura de grado 2 en el recto anterior del muslo derecho y Lucas Vázquez con lesión de grado 1 en la zona isquiotibial del muslo izquierdo.

El conjunto comandado por el técnico francés que ya no tienen nada en juego, recibirá el próximo sábado al equipo de Fran Escribá en el Santiago Bernabéu, donde intentará dar su mejor imagen para tratar de asegurarse la plaza en los puestos europeos.