Las taquillas de Son Moix han colgado su segundo “sold out” de la temporada. Desde el primer día que se pusieron a la venta las entradas, la hinchada bermellona hacía cola para conseguir las entradas y en poco más de una semana, el Mallorca ha conseguido llenar el estadio para el partido frente al líder de LaLiga. El otro equipo visitante que arrasó con todas las entradas fue el Atlético de Madrid.

Han transcurrido siete años desde aquel 28 de octubre de 2012 en la que el Real Madrid visitaba por última vez la isla. El resultado final de aquel partido fue arrasador por parte del equipo blanco, con un 0-5 y cuyos protagonistas fueron Higuaín (x2), Ronaldo (x2) y Callejón. Algunos de los madridistas que por aquel entonces jugaban en esa plantilla, siguen haciéndolo a día de hoy, como es el caso de Ramos, Modric y Varane. Pero la historia del Mallorca ha cambiado y progresado en esos siete años.

La actual plantilla bermellona no conserva ningún futbolista de aquella época, ha variado mucho y una gran cantidad de futbolistas han pasado por el vestuario local, lo que refleja la inestabilidad que se ha vivido en la isla. No ha sido hasta hace dos temporadas donde se ha logrado construir un bloque que por fin comienza a dar sus resultados.

Respeto al rival

El Mallorca no lleva una buena racha. De los ocho partidos jugados, tan solo ha conseguido 7 puntos, lo cual ha provocado que ocupe la 18º posición. De esos partidos, tan solo ha ganado dos, ha empatado en uno y ha perdido en cinco. Seis tantos a favor son los que llevan hasta ahora y doce encajados por parte de los rivales que ha tenido hasta el momento.

El entrenador mallorquinista, Vicente Moreno, asegura que será un partido muy difícil por la entidad del rival: “Los equipos como el Real Madrid necesitan poco para ganar. Nosotros tendremos que hacer nuestro mejor partido. A partir de ahí, tendremos opciones de ganas. De eso nos hemos ocupado esta semana”. Moreno afronta el partido como uno más, siendo consciente de la superioridad del rival, pero con la necesidad de ganar y sumar los tres puntos y mejorar la situación en la que se encuentran, en zona de descenso.

Alineación preparada

La plantilla ya está preparada para recibir al Real Madrid y no cambiará mucho a como se ha podido ver en las últimas jornadas. La defensa formada por Fran Gámez en el lateral izquierdo; el centro del campo estará dirigido por Salva Sevilla y Baba, con Dani Rodríguez y Lago en las bandas; y en la delantera Budimir y Febas.

Una incógnita es la presencia del japonés Kubo. Se conoce casi con toda seguridad que no jugará de titular. El joven japonés fue cedido por el Real Madrid. El técnico mallorquín podrá utilizarlo en la segunda parte del encuentro si el equipo se encuentra en desventaja. Kubo ha asegurado que el Mallorca puede aportarle muchas cosas, según amplió en una entrevista al diario Marca: “El ambiente del club, los jugadores, el entrenador. Entre el Real Madrid, mi representante y yo decidimos que el Mallorca era la mejor opción. Creo que más que aportar yo al Mallorca, es el Mallorca el que puede aportarme muchas cosas a mí para que pueda crecer”.

Raíllo vuelve a jugar

Antonio Raíllo sufría el pasado mes de septiembre una lesión más importante de lo que parecía. Una lesión en las vértebras auguraba una baja de entre de entre seis y ocho semanas, siempre y cuando el jugador presentara una buena evolución y buenas sensaciones. Para alivio de Vicente Moreno, Raíllo estará disponible para el partido frente al Real Madrid. Se vio obligado a retirarse a veinte minutos del final del partido frente el Espanyol por problemas de mareos a consecuencia de sus molestias en las cervicales.

Superadas las molestias, el cordobés se medirá ante los madridistas junto a su compañero eslovaco Martín Valjent, ambos centrales y pilares del equipo.

Un líder descompensado

Los de Zidane jugarán con el clásico 4-3-3 pese al mal momento y la falta de alternativas. El técnico francés se queda sin alternativas para ejecutar un “plan B”, con una plantilla descompensada en algunas posiciones. La causa, las numerosas bajas que el Real Madrid está sufriendo en los últimos meses. El conjunto blanco suele jugar con los laterales muy avanzados y sus centrales en mediocampo. Los mejores resultados los ha tenido cuando el equipo ha funcionado al conjunto y protegiendo aún más en defensa. La tarea se complica cuando el rival conduce y toma la posición del balón en superioridad a los madridistas lo que conlleva a que se produzcan más despistes.

El Mallorca aterriza en la novena jornada tras sumar su segunda victoria del curso. El actual líder no le pondrá las cosas fáciles. Las condiciones de ambos equipos son las siguientes: al Mallorca le ha favorecido la victoria ante el Espanyol, pero ha de utilizar bien sus armas ante un equipo grande y evitar los errores individuales. En el otro bando, el Real Madrid no se puede permitir perder el martes contra el Galatasaray en Champions por lo que se intuye que Zidane reserve a alguno de sus jugadores pensando en el partido del martes.

En cuanto al ataque, se le puede hacer daño ofensivamente, pero el Mallorca no es de los equipos que más daño pueda hacer. El Mallorca debe ejercer una presión alta y tiene que buscar el error del rival en su juego. Para que el partido incline la balanza hacia uno u otro lado, influirá mucho cómo entre en el partido el conjunto blanco.

Ambos equipos llegan al encuentro con pequeñas necesidades. El Mallorca, por su posición actual en la tabla de clasificaciones, debe sacar un resultado positivo, sobre todo por el hecho de jugar en casa siendo un gran punto a favor. Por su parte, el Madrid necesita otro triunfo si quiere seguir liderando la clasificación. Ambos son equipos muy preparados y están preparados para soportar la carga de trabajo. Tienen que hacer lo que han hecho hasta ahora, simple y llanamente.