Valencia y Chelsea volvían a verse las caras en la quinta jornada de la UEFA Champions League tras la victoria valencianista en Stamford Bridge por la mínima. Ambos equipos llegaban al encuentro siendo conscientes de que una victoria les daría la clasificación matemática para octavos de final.

El Valencia llegaba a este partido lleno de confianza tras su contundente victoria frente al Lille por 4-1 en Mestalla, en un choque vital que determinaría el devenir del club valencianista y que le acercaría a sus posibilidades de pasar a la siguiente ronda.

El Chelsea, por su parte, acabó su último enfrentamiento de la competición empatando en casa a CUATRO frente al Ajax de Ámsterdam en un partido frenético.

Carlos Soler abrió el marcador

En una primera parte muy igualada con llegadas de ambos equipos, el Valencia fue capaz de sostenerse a los  peligrosos centros laterales del Chelsea con paradones de Cillessen.

En un intercambio de papeles, Carlos Soler entrando de segunda línea remató un gran centro de Rodrigo, jugada precedida de una fabulosa intervención del guardameta ché sobre un disparo del delantero blue Abraham.

Foto: UEFA
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El Chelsea consiguió adelantarse

Solo un minuto había pasado desde el gol de Carlos Soler, cuando el ex jugador del Real Madrid, Mateo Kovacic, igualaría el partido con un certero disparo raso pegado al poste.

Con el encuentro empatado a uno en la primera mitad y la lesión de Tammy Abraham en el Chelsea, la segunda parte arrancó con buenas sensaciones para el conjunto valencianista.

Sin embargo, a los cinco minutos de comenzar la segunda mitad, Christian Pulisic enviaría el balón al fondo de la red propiciado por un cabezazo de Zouma. El gol tardaría en subir al marcador debido a la posición dudosa por fuera de juego del estadounidense que, tras ser revisada la jugada en el VAR, acabó subiendo al marcador y poniendo así por delante al conjunto londinense.

Foto: UEFA
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Wass despertó a Mestalla con un golazo

Con la entrada en el terreno de juego de Coquelin debido a la lesión de Jaume Costa, el equipo de Celades tuvo que hacer una reestructuración en el sistema de juego. El recién ingresado francés ocuparía el medio campo junto a Parejo y sería Daniel Wass el encargado de coger la posición de lateral derecho en ausencia del lesionado Jaume.

Después de varias llegadas claras del Valencia, Rodrigo dejó pasar un balón abierto a la banda para el posible centro tras la incorporación de Daniel Wass. A pesar de que la intención del danés era poner un centro dentro del área de Kepa, vio cómo su balón trazaba una curva perfecta que acabaría chocando en el poste para finalmente introducirse dentro de la portería defendida por el portero español.

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El Valencia perdonó demasiado

Pese a haber sido un encuentro muy igualado y disputado por ambos conjuntos, no faltaron las ocasiones a lo largo del encuentro. 

Los de Lampard conseguían llegar con cierta facilidad al área valencianista a través de centros laterales, pero se toparon  con grandes paradas de Cillessen además de intervenciones defensivas providenciales por parte tanto de Garay como de Paulista.

Ya en la segunda mitad y con el resultado en contra, Gayà era derribado dentro del área propiciando así una ocasión manifiesta para el Valencia desde los once metros. A pesar del buen golpeo en el penalti del capitán Dani Parejo, el guardameta blue adivinaría la dirección del lanzamiento y realizando así una magnífica parada que mantenía al Chelsea por delante del marcador.

Foto UEFA
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Ya con el 2-2 en el marcador, el partido adquirió tintes dramáticos ya que estaba totalmente roto y podría llegar el gol de cualquier lado. Sin embargo, las ocasiones finales fueron para el conjunto ché que, con la entrada final de Gameiro y Kangin Lee y Mestalla animando a sus jugadores, se llenó de confianza para ir a por el partido. Rodrigo tuvo en sus botas la victoria valencianista a pocos segundos del final del partido, pero la falta de acierto evitó que el conjunto local sumase los tres puntos.

Los de Celades pierden así su condición de local para el último partido de la fase de grupos, en el que tendrán que salir a ganar en lo que será una final en Ámsterdam frente al Ajax.