Nuevo partido del Cádiz CF en el Ramón de Carranza, y nueva decepción tras una mala imagen mostrada por el equipo, que comenzaba la primera parte dominando el juego y controlando en todo momento la situación.

A diferencia de lo visto en Logroño, el Cádiz comenzó el partido con más intensidad y creando ocasiones de peligro en el área rival, aunque sin acertar de cara a puerta. La intención del CD Mirandés era clara: jugar a lo que siempre ha sabido jugar el Cádiz, que no es otra cosa que hacer correr hacia atrás y en la más mínima oportunidad, hacer daño al contraataque. Aunque en esta ocasión, parece que el equipo de Iraola sí se acordó de la lección aprendida y los de Álvaro Cervera, sin embargo, la están olvidando por cada jornada que pasa.

Cabe destacar un balón perdido por el canterano Sergio González en campo contrario, y que sirvió al equipo de Miranda de Ebro para realizar una contra que acabaría con un disparo de Antonio Sánchez que se marchaba al lateral de la red. El Cádiz, por su parte, contestaba con un magnífico chut de Perea que despejaba Limones.

A cinco minutos del descanso, sería el Cádiz quien golpeó primero con un gol del 'Choco' Lozano tras un gran centro de Alfonso Espino para delirión de la parroquia cadista. El lateral uruguayo cuajó un partido muy completo como los que realizaba al principio de Liga, y su lucha era incuestionable. Poco duró la alegría en Carranza ya que, dos minutos después, sería Merquelanz quien conectara un gran disparo para hacer el empate justo antes del pitido final del primer tiempo.

Se marchaban ambos equipos al descanso, y a su vuelta, a las primeras de cambio, una falta lateral nada más comenzar, se convertía en gol para los de Cervera. El lanzamiento de falta de Álex Fernández fue peinado en el primer palo por JP.Rhyner, y suponía el segundo tanto que ponía de nuevo a los cadistas con ventaja en el marcador. Durante el resto de la segunda mitad, nada cambiaba. Seguía el conjunto rojillo buscando las cosquillas del Cádiz en defensa y lanzando contraataques peligrosos de cara a la puerta de Alberto Cifuentes. Merquelanz era una continua pesadilla para la defensa gaditana y el lateral derecho, Iza, no conseguía apaciguar las embestidas por la banda de los de Andoni Iraola.

Cuando parecía más cercano el gol del Mirandés que el del Cádiz, un buen pase del recién entrado Jorge Pombo, en su estreno en la Tacita de Plata, era aprovechado por Nano Mesa para montar un gran contraataque y finalizarlo de forma espectacular con un gol que hacía presagiar que el partido estaba más que atado. Se añadieron cinco minutos al reglamentario, pero la pérdida de tiempo en la revisión del gol de Nano Mesa debía de ser recuperada.

En tan solo dos minutos, coincidiendo con los dos últimos del partido, el CD Mirandés logró igualar la contienda con dos goles propiciados por la falta de intensidad, la falta de templanza y la falta de concentración de los de Cervera. Primero, un disparo de Marcos Souza desde fuera del área, era despejado por Cifuentes al palo, y Guridi, atento al rechace, recortaba distancias. Luego, una desafortunada falta que no debió ocurrir, para culpa de los jugadores cadistas, acabaría en una falta lejana que acabó con gol de Odei y empataría el partido. La decepción en el Ramón de Carranza era mayúscula y aunque el equipo siga líder, existe la sensación de estar perdiendo el colchón de puntos por errores infantiles y desconcentración.