Jaume Costa llegó procedente de Villarreal, en calidad de cedido para cubrir la posición de lateral izquierdo junto a Gayà. Lo que parecía una incorporación superflua debido a la importancia que tiene el de Pedreguer en el campo, acabó formando parte de 19 encuentros en la presente campaña, incluso dando una asistencia.

La primera vuelta de la temporada cuajó muy buenas actuaciones demostrando un buen nivel, y en la segunda parte dio un bajón (como el resto del equipo) y se convirtió en un lateral comprometido y cumplidor.

Con la vuelta de Lato y debido a la edad del valenciano (33 años en marzo), se ha decidido que Jaume vuelva a su casa: Villarreal. En el club ché se le recordará como un gran valencianista que demostró la pasión por el escudo, un murciélago que mordía como uno más, y un hombre curtido que en los momentos difíciles hizo autocrítica y siempre dio la cara.

En su cuenta personal de Instagram, se despedía de esta forma:

"Fin a una temporada que empezó muy bien y acabo siendo una pesadilla... No hay excusas que puedan suavizar el final de temporada tan horroroso que hemos hecho, pero si hay acciones y hechos que condicionan el día a día de un vestuario. No me escondo, nunca lo he hecho y nunca lo haré. He fallado, lo sé, pero nadie podrá decirme que no lo he dado todo por el club tanto dentro como fuera del campo. Pero no todo ha sido malo para mi... Soy una persona que siempre intenta aprender de los errores y sobre todo ver el lado positivo de las cosas, y me llevo muchas de este año. Me llevo conmigo la experiencia de volver al club que me vio crecer, la ilusión de jugar champions, la de conocer a grandes personas que se han convertido en amigos, la de volver a coincidir con gente de mi infancia, y sobre todo el cariño que me ha transmitido la afición cada vez que ha podido. No os olvidéis nunca que vosotros sois parte fundamental de un club. Gracias de corazón a la gente que confió en mi y a cada uno de mis compañeros por el trato, sois un grupo fantástico y no dejéis que nada ni nadie diga lo contrario. Ahora me toca volver al club que me lo dio todo y me hizo un hombre. Nunca nadie me ha regalado nada y como siempre pelearé para quedarme con los míos. Suerte en todo lo que venga y gracias de corazón."

Desde aquí le deseamos lo mejor, ¡suerte en tu regreso a casa, Jaume!