Sonaba el pitido inicial en el Ramón de Carranza, en un partido crucial para ambos conjuntos. Un encuentro vacío, irreconocible, donde la ausencia de los aficionados protagonizaba el silencio inhabitual de estos partidos de talla mundial. Los gaditanos, a punto de sellar su salvación. Los de Zidane, con presión, después de empatar contra el Getafe.

  • Una primera parte con un Benzema imparable

Sendos equipos mostraron su estilo de juego en los primeros minutos. Los blancos con su característica posesión, y por el contrario, los amarillos, esperando el fallo rival para castigarlos. La primera ocasión la tuvo Jens Jonsson, que tras una buena jugada individual del ''tiburón'' Álvaro Negredo, sorteando contrarios con su zancada, remató fuera de la portería. El Real Madrid no se encontraba cómodo en el campo, el Cádiz achuchaba y no lograba tener profundidad de cara al área rival. El bloque gaditano marcaba muy bien sus líneas defensivas y los madrileños no eran capaces de romperlas. En el minuto 11 llegó el segundo tiro de los de Cervera, ejecutado por Jairo, pero atrapó bien Courtois.

En el minuto 28, Iza cometería un penalti por un pisotón a Vinicius, que venía galopando con la finalidad de recibir un pase del galo. Mateu Lahoz fue a revisar el VAR y finalmente, decidió señalar la pena máxima. En ese momento, los gaditanos comenzaron a mostrar sus carencias defensivamente. 

El segundo gol llegaría en el minuto 33, tras una buena jugada de Karim Benzema en el área gaditana arrastrando jugadores amarillos y enviando un centro medido que Odriozola conseguiría embolsar con un testarazo a la red. La defensa de Cervera hacía aguas y los desequilibrios en el campo eran claros. 

En los últimos minutos de la primera parte, vendría el tercero, con un centro con el exterior de las botas de Casemiro que el francés no iba a perdonar. 

  • Los amarillos, sin perder la esperanza

Cuando todo el mundo pensaba que el Cádiz iba a salir preparado para aguantar un festival de goles, los gaditanos volvieron a demostrar que ''la lucha no se negocia''. Álvaro Cervera dio entrada a jugadores para darle frescura al equipo y con ello, pensando en la próxima jornada contra el Valladolid. 

El Real Madrid ya se había relajado y los amarillos no bajaron la cabeza en ningún momento del encuentro. Sabían lo importante que era salir de este partido con buenas sensaciones, y lo cierto es, que lucharon hasta el final

Aunque el dominio blanco era palpable en el terreno de juego, los jugadores cadistas se mostraron incansables y sin dar ningún balón por perdido. En el minuto 58, perdió el ''Choco'' una oportunidad de oro tras desperdiciar un gran centro del Pacha Espino. 

Diez minutos después, Ledesma sacó a relucir sus guantes atrapando un disparo de Marcelo que se envenenaba tras un espectacular pase de Benzema. El encuentro iba muriendo poco a poco y el resultado parecía sentenciado, aunque Mariano y Rodrygo pudieron sentenciar la goleada. 

Los gaditanos, a pesar de sus carencias en ataque y del partido de nivel mundial que se les presentaba, demostraron actitud durante los noventa minutos ante un Real Madrid que no perdonó en la primera parte. Este es el camino.