La Sociedad Deportiva Eibar cerró el domingo ante el Betis (1-1) la temporada en Ipurua con un buen sabor de boca a pesar del empate obtenido ante el cuadro verdiblanco. La tarde del fin de semana, sin presión al estar matemáticamente salvados desde hace varias jornadas, fue muy tranquila para los armeros aunque tuvo un sabor agridulce debido a las numerosas despedidas que se produjeron, algunas de ellas de jugadores muy queridos en las últimas temporadas.

El primero de ellos es Xabi Irureta. El guardameta, que ha vivido el ascenso a la élite en Ipurua desde Segunda B a Primera División, se marchó de la que ha sido su casa durante varias temporadas. A pesar de haber sido suplente durante toda la campaña a la sombra de Asier Riesgo, el portero pudo despedirse de la que ha sido su afición durante muchos años volviéndose a sentir futbolista, como él mismo dijo, y disfrutar de un encuentro que fue toda una fiesta.

Por otro lado, en la parcela defensiva abandonarán el Eibar en verano, con casi toda seguridad, Pantic y Ekiza. A ellos se les podría añadir Ansotegi, que todavía no ha llegado a la cantidad e minutos y partidos estipulada para renovar automáticamente su contrato. Pantic, cedido, no volverá a Ipurua, al igual que un Ekiza que ha estado mucho tiempo lesionado. Otro de los que podría abandonar el barco es Ramis, que todavía no ha renovado.

En el centro del campo José Luis Mendilibar también contará con varias bajas la próxima temporada. Los cedidos Radosevic y Hajrovic, que han tenido poco protagonismo, volverán a sus respectivos clubes, mientras Saúl Berjón, que no ha disputado tantos minutos como hace un año, tiene muy complicado seguir. En la delantera el hombre gol Borja Bastón finalizará su cesión y regresará al Atlético de Madrid. Los armeros buscarán una nueva cesión, aunque saben lo complicado que resultará puesto que el atacante, tras una gran campaña, tendrá muchas opciones de cara a su futuro.