A un sólo punto está el Real Madrid de Zinedine Zidane de conquistar la Liga, un título que le viene siendo esquivo al club blanco en los último años y que estaba marcado en rojo esta temporada en las oficinas del Bernabéu, título que el equipo madridista deberá ratificar en Málaga el domingo para hacerse con un título que había tiranizado el Barça las últimas temporadas.
Cristiano volvió a aparecer en otro partido clave, cuando el equipo más necesitaba sus goles y su liderazgo, y lo hizo firmando un doblete que puso el 0-2 en el marcador tras marcar dos grandes tantos marca de la casa, siempre bien acompañado por sus escuderos en ataque Isco y Benzema, que también hicieron un partido interesante y a la altura de lo que exigía el choque.
El Celta salió con todo, como si de una final se tratara también para los de Berizzo, y es que los celtiñas salieron a presionar desde muy arriba para dificultar la salida de balón del Madrid, que se vio obligado a darlo todo ante un equipo que salió con su once de gala para poner en aprietos a los de Zizou.
Otra vez Cristiano
El Madrid salió concentrado desde el inicio, sin especular con el resultado ante un Celta que dejó claras sus intenciones de complicarle la vida a los de Zizou. Los locales trataron de asfixiar al Madrid en la salida de balón, pero los blancos, hoy de negro, se desquitaron de la presión con un gran gol de Cristiano, que en el minuto 10 daba aire a su equipo gracias a un gran zurdazo que Sergio sólo pudo contemplar.
El 7 volvía a aparecer en una cita clave para el equipo y ponía al Madrid por delante en el marcador. El equipo de Zidane no logró dominar el juego por completo pese a mandar durante todo el partido en el marcador, sólo cuando el balón estaba en posesión de los Modric, Isco, Kroos y Benzema respiraban los blancos, que sufrían con cada contra celtiña, que hicieron sufrir a los madrileños atrás.
Entre tanta imprecisión defensiva de los blancos, los locales estuvieron a punto de firmar el empate con un disparo de Wass al estilo Cristiano que Keylor logró repeler. Los celestes gozaron de buenas ocasiones gracias a la fragilidad defensiva visitante, pero Berizzo y sus hombres no lograron perforar la portería de un seguro Keylor.
Segunda mitad de goles
El Celta no supo aprovechar sus ocasiones en la primera mitad y a los tres minutos de reanudar el encuentro Cristiano hizo pagar esa falta de gol a los de Berizzo con su segundo gol. Danilo montó la contra tras una imprecisión de Guidetti dentro del área blanca, contra que guío magistralmente Isco para servir el segundo de la noche a un Cristiano inapelable de cara al gol.
El partido parecía entrar en una situación de calma permanente, hasta que llegó la polémica con la expulsión de Iago Aspas. El gallego tenía ya tarjeta amarilla previa, y la acción con Ramos dentro del área fue interpretada por Martínez Munuera como un piscinazo del 10 del Celta, por lo que le mostró la segunda amarilla que supuso su polémica expulsión, lo que hizo al Celta meterse de nuevo en el partido paradójicamente.
Poco después el que pidió penalti fue Cristiano, pero el árbitro no lo vio así y decidió no señalar pena máxima, una acción en la que el portugués protestó y Jonny pidió amarilla para el 7 del Madrid, una tarjeta que habría impedido la participación del de Madeira en Málaga. Guidetti vengó la expulsión de Aspas haciendo el 1-2 tras una paradón de Keylor que el sueco mandó al fondo de la red para apretar el marcador.
El Madrid respondió rápido con el tercer gol obra de Benzema a pase de Marcelo para de esta forma sentenciar el partido y disipar las dudas que se habían abierto con el gol de los vigueses. Kroos remató la faena en el 88 para firmar el 1-4 definitivo, un triunfo que deja al Madrid a un pasito del título liguero, pieza codiciada por el madridismo desde hace tiempo y que tendrá su punto final este domingo en Málaga.
