Kansas City, Missouri - Del desasosiego a la felicidad hay pocas yardas de diferencia. El trabajo y la seriedad suelen ser la clave de tornar lo primero en lo segundo. Kansas City Chiefs está aplicando esa teoría para transformarse.

Es demasiado pronto para dilucidar si el gusano se ha transformado en mariposa, pero si algo esclarece es que, ahora y bajo la batuta de Andy Reid y Alex Smith, los Chiefs son un equipo competitivo. Y con dos victorias en dos partidos. Que ya es, para ponerlo en contexto, lo mismo que los de Kansas City hicieron en toda la temporada pasada.

Los Dallas Cowboys se vieron sorprendidos por sus rivales, hace unos meses abandonados en sí mismos. Tony Romo acabó con 298 yardas en 20 pases completos de 48 intentos, además de un pase de touchdown.

Partido de un solo punto

Kansas City se puso pronto por delante mediante un buen drive de Alex Smith, que, después de dibujar una estética carrera personal, culminó para Jamaal Charles. Poco después, Tony Romo se asoció con Dez Bryant y ambos entraron en el partido triunfantes. Primero, el primero lanzó un pase de 50 yardas que atrapó el segundo. En la continuación, llegó el primer touchdown de Dallas, que se puso 10-7 arriba.

Un segundo cuarto sin anotaciones precedió a la reanudación del igualado partido. La diferencia la marcó un solo punto. Fue suficiente para los Chiefs, aleccionados en sudar y a exprimir intensidad para salir adelante. Alex Smith tiene dos colaboradores de lujo. Si en la primera mitad se sirvió de Jamaal Charles para convertirlo en receptor, en la segunda el elegido fue Dwayne Bowe. Buenos objetivos en donde mirar. Touchdown y ventaja de uno para los Chiefs a falta de un cuarto. En el último, un field goal por cada equipo mantuvo las líneas fronterizas y la victoria en la batalla viajó a Kansas City. Los Chiefs renacen.