Los huracanes de Carolina creen que el capitán puede ser un trabajo de dos hombres. Ya que algunas personas creen que los capitanes son líderes cruciales en los vestuarios de la NHL. Otros afirman que la capitanía es un honor sobrestimado que principalmente impulsa los deberes de los medios de un jugador.

El equipo hizo el extraño anuncio de que Jordan Staal y Justin Faulk servirían como co-capitanes, mientras que Jeff Skinner obtiene ser el capitán asistente. Y así lo explicaron de esta manera:

Staal servirá principalmente como capitán en casa y Faulk servirá principalmente como capitán en los partidos de visitante.”

El vestuario del hockey es diferente de cualquier otro deporte. Hace mucho tiempo se determinó que tener una voz en la parte superior de la cadena alimentaria es esencial para que cada uno tire de la misma cuerda en un deporte donde el trabajo en equipo y el esfuerzo pueden triunfar sobre el talento y, a menudo, direcciones inesperadas y cambiar el vector entero de una temporada.

El liderazgo de Rod Brind'Amour durante los playoffs de 2006 sigue siendo uno de los mejores ejemplos de manejo de la adversidad, dirigiendo a los Huracanes en la dirección correcta en varias situaciones cruciales.

Los Hurricaness no han llegado a los playoffs desde que Brind'Amour se vio obligado a renunciar a la capitanía y dársela a Eric Staal; en enero de 2010, y aunque eso no significa que Staal es un mal capitán, significa que no tenía lo que se necesita para obtener a ese grupo específico de compañeros de equipo jugando a su pleno potencial.

Es posible quedarse sin un capitán -como hicieron los huracanes la temporada pasada- ya veces es mejor, si no hay una voz dominante en el vestidor capaz de manejar esa tarea. Pero tener una persona en el que el rol crea una responsabilidad que se sienta en el equipo. Un papel de liderazgo compartido es un rol de liderazgo sin llenar.

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