Mientras en los Sabres se continúa con a una reconstrucción con el joven Jack Eichel como punta de lanza, hay cosas que no cambian. Jason Pominville sigue enfundado en el jersey azul de Buffalo y ya alcanzó los mil partidos con la franquicia.  Pominville logró la hazaña la semana pasada en la derrota de los Sabres en Ottawa de 4-2, incluso marcó el gol 283 de su trayectoria en la NHL. 

La familia Pegula (dueña de los Sabres) insistió en que Pominville trajera a su familia al vestidor para el partido en casa de los Senators. El coach Phil Housley dijo que Pominville había sido un empuje extra para el equipo para afrontar el partido esa noche. 

Pominville sigue como un titular de primera línea a sus 36 años 

Pominville es respetado por sus compañeros en la NHL y a sus 36 años sigue tan campante como en antaño. Normalmente muchos jugadores a esa edad están retirados o ya en el valle de su rendimiento. Pominville es parte esencial de la primera línea de los Sabres y uno de los sticks más productivos del equipo en cuanto a goles y asistencias. 

Lleva 14 años en la liga por la manera en que trata a su cuerpo antes de las temporadas. En la actual campaña, Pominville lleva 8 goles y 7 asistencias. Jóvenes del equipo como Jack Eichel o el pick global del draft de 2018, Rasmus Dahlin, ya han constatado con Pomnville lo que es necesario para ser un líder y jugador por tanto tiempo en la liga.  

Ha sido parte de la mejor línea de los Sabres en lo que va de temporada, junto a Eichel y Jeff Skinner y eso habla de lo determinante que todavía puede ser. Pominville se convirtió en el jugador 328 en la historia en jugar 1.000 partidos en la liga y el 11º con en el jersey de los Buffalo Sabres. Pocos jugadores en la historia del hockey al más alto nivel han podido jugar tantos partidos y tener tanta producción (711 puntos de Jason en su carrera). 

La esposa de Pominville, Kim, dijo que la disciplina de su esposo es lo que hace la diferencia. El tratar a su cuerpo como un templo y es básico por que es la materia prima de un deportista profesional. Pominville por eso pudo jugar 345 partidos seguidos con los Sabres de 2006 a 2010. En su breve paso por el Minnesota Wild tuvo una buena racha de 231 juegos de 2013 a 2016. 

Ha jugado 8 temporadas completas y eso es con el calendario de 82 partidos. Pominville tiene buena visión y son los instintos de hockey como se pudiera decir, lo que han hecho productivo por tanto tiempo. El poder sacar tiros rápidos o el saber donde estará el puck y adelantarse a la jugada. En su más reciente racha de puntos en la actual campaña, ha estado atacando de gran manera la red. Ese es uno de los ejemplos.