La larga carrera de Jeff Blashill como entrenador de los Detroit Red Wings ha terminado.
Un día después de que terminara su temporada regular, los Red Wings anunciaron que permitieron que expirara el contrato de Blashill. Hicieron lo mismo con el entrenador asistente Doug Houda y el entrenador de porteros Jeff Salajko. Después de siete temporadas, Jeff Blashill deja el puesto como cabeza de los Red Wings.
El entrenador, nativo de Detroit, asumió el cargo antes de la temporada 2015-16. Ese terminó siendo el único año en que los Red Wings llegaron a los playoffs con Blashill, donde ganaron un solo juego de postemporada.
Desde esa corta carrera, los Red Wings se han perdido los playoffs durante seis temporadas consecutivas. Blashill termina con un récord de 204-261-72, lo que se traduce en un porcentaje de .447 puntos en 537 juegos.
Por un lado, siete temporadas representan mucho tiempo para probarse a uno mismo. Por otro lado, los Red Wings rara vez (si es que alguna vez) proporcionaron a Blashill el tipo de talento que inspiraría aspiraciones elevadas. Se hizo cargo de un equipo en sus últimos respiros de antigua gloria y luego limpió los escombros de una larga reconstrucción.
Yzerman con retos que afrontar
Es crucial para Steve Yzerman y compañía tomar las decisiones correctas esta temporada baja. Eso comienza con encontrar al entrenador adecuado, pero también con trazar un camino inteligente en la agencia libre (y posiblemente a través de intercambios).
Junto con otra alta selección de primera ronda, los Red Wings tienen una selección adicional de segunda ronda, dos selecciones adicionales de cuarta ronda y una séptima selección adicional. También poseen una selección adicional de segunda ronda para 2023.
Con casi $35 millones en espacio bajo el tope salarial, los Red Wings podrían acelerar su ascenso si así lo desean. Dicho esto, existe el riesgo de tratar de llegar demasiado lejos. Por lo que sabemos, podría ser más prudente que el equipo continúe con su enfoque incremental y tal vez usen su espacio salarial para absorber contratos cortos y problemáticos.
Por supuesto, un enfoque más incremental podría hacer de Detroit un destino menos deseable para un entrenador más establecido. Todo esto entra en los retos que Yzerman y su cuadro deberá enfrentar para intentar levantar de nuevo a la franquicia de la rueda alada.