0 puntos en las últimas 5 carreras disputadas. Esta es la demoledora estadística con la que llega Marcus Ericcson al Gran Premio de Gran Bretaña, una prueba que en principio no favorece a las características del monoplaza suizo.
Tras el espectacular arranque de temporada de los de Sauber (5ª posición de Nasr en la carrera inaugural), el rendimiento de los monoplazas ha bajado bastante, hasta el punto de estar entre los 10 mejores una sola vez en los cinco últimos grandes premios. Ericcson ha confirmado hoy que no esperan grandes resultados en este verano:
"Sabíamos que el verano iba a ver algo difícil para nosotros, pero tenemos una gran mejora que vendrá después del verano. Estamos sufriendo un poco por el momento con otros trayendo mejoras a sus coches y hemos perdido el contacto con ellos en carrera. Pero creo que hemos demostrado en Austria que si maximizamos lo que tenemos, podemos seguir siendo competitivos en la parte media".
También ha valorado el trabajo de Mark Smith, nuevo director técnico de la escudería, con quien ya trabajó en Caterham y tiene "muy buen feeling gracias a su llegada al equipo". A pesar de que reconoce que "no va a poder aportar mucho a corto plazo", cree que a largo plazo se mostrarán los beneficios de su llegada a Sauber.
Con los dos pilotos de Sauber separados por tan solo 11 puntos, el sueco confiesa que "Felipe y yo trabajamos muy bien juntos". Además espera lograr reducir la ventaja que Nasr tiene actualmente ahora que llegan a "uno de mis circuitos preferidos, en el que espero luchar y tener un gran fin de semana", cerraba Ericsson.