El espectacular podio del Autódromo Hermanos Rodríguez de Ciudad de México tuvo una ausencia notable en este 2018. Ningún representante de Mercedes se ganó pisar el Foro Sol, algo que solo había pasado en Austria, cuando ambos monoplazas abandonaron. En el país azteca, ni el campeón del mundo, Lewis Hamilton, ni su escudero, Valtteri Bottas, pudieron pasar del cuarto y quinto lugar, respectivamente.

La degradación de los neumáticos de Pirelli fue la gran protagonista del fin de semana, pero fue especialmente virulenta en las balas plateadas. La imagen de ambos pilotos saltándose la primera curva al defenderse de sus rivales resumen el sufrimiento extremo al que les sometieron sus gomas.

Ante tal imagen, Toto Wolff, director de la escudería, ha tenido que desmentir que se deba a la decisión de no usar el nuevo diseño de las llantas que Mercedes estrenó en Singapur. A pesar de recibir el consentimiento de la FIA ante la consulta de Ferrari, los de Brackley decidieron no arriesgarse a una hipotética reconsideración y finalmente no usaron sus novedosas llantas en México.

Toto Wolff ha señalado a la parte delantera del monoplaza como la causante de esta degradación extrema: "El principal problema en esta ocasión fue la parte delantera izquierda […]. Nuestro coche fue el más rápido a veces, y otras veces no. A veces parecía un coche de F3 […]. No creo que tuviéramos una sola vuelta en la que hiciéramos funcionar el neumático. No creo que nuestro coche gestionara el neumático, sino más bien al revés. Y no tengo explicaciones sobre ello, las pediremos".