Las cosas han cambiado mucho en un año en el box de Yamaha. Después de dos temporadas donde los resultados no llegaron y donde batieron un nuevo récord sin victorias para la fábrica hasta la primera posición de Viñales en Australia, este año han llegado con ganas de redimirse y dar pasos adelante que les lleven a buscar una nueva corona, que no ganan desde 2015 con Jorge Lorenzo.

Las mejores en Yamaha han sido evidentes desde el inicio del campeonato en Qatar, incluso ya antes con los test de pretemporada en Sepang o Losail. En tres carreras que se han disputado hasta el momento, han sumado dos podios, exactamente dos segundos puestos con Valentino Rossi, segundo también en la clasificación general de puntos. Aun así, el piloto italiano se mantiene alerta por lo que pueda pasar en Europa, la prueba de fuego para confirmar sus buenas sensaciones.

Valentino Rossi, con pies de plomo

Rossi sigue sumando podios a su carrera deportiva. Con 40 años, muchos dudan aún de sus posibilidades, pero el italiano ha ido callando bocas a todo el mundo una vez más. En el inicio de temporada ha conseguido dos segundos puestos, uno en Argentina tras una lucha cuerpo a cuerpo con Dovizioso, al que adelantó en la última vuelta; y en Austin, después de liderar la carrera en varios giros, pero sin poder hacer nada ante el ritmo vertiginoso de la Suzuki de Álex Rins, que ganó la carrera.

Con estos resultados y el cero de Márquez en Texas por su caída, el italiano llega a Jerez como segundo piloto en la clasificación general de puntos, a tres de distancia de la cabeza, donde se sitúa Andrea Dovizioso. Rossi mantiene todas las opciones posibles para salir del Gran Premio de España como líder y con una lucha por el mundial más apretada que nunca. Ya lo dijo Uccio, y es que la décima corona de Valentino siempre ha sido el objetivo en todos estos años, pero en el pasado no había tenido el ritmo que tiene ahora y que le puede ayudar a conseguirlo. Tampoco se había visto un campeonato tan igualado hasta la fecha.

A pesar de las opciones, el italiano quiere poner calma en el asunto. Quedan muchas carreras por delante y la llegada a Europa resulta ser un hecho muy clave para Yamaha. En Jerez comenzaron sus dolores de cabeza en temporadas pasadas y no quieren volver a repetirlo. Su objetivo es confirmar los pasos adelante y las mejoras que le han hecho competitivos hasta el momento y poder conseguir una nueva victoria en España. Valentino Rossi es experto en ello, suma ya siete éxitos en el trazado andaluz y es el piloto que más galardones se han llevado en terreno español.

Maverick Viñales no se quiere quedar atrás

Ni en sus peores sueños habría pensado en un inicio de temporada así. Y menos después de su buen ritmo en la pretemporada, pero a Maverick Viñales le ha tocado este año la peor parte en Yamaha. Desde el inicio del mundial, el español no ha pasado de la séptima posición que consiguió en Qatar. En Argentina ni siquiera pudo acabar y Austin fue toda una pesadilla con las penalizaciones. Tras saltarse, mínimamente, la salida, realizó una long lap cuando su equipo le avisó de la sanción. Se equivocó en cuanto al procedimiento, ya que, en estos casos, el castigo es un paso por el pitlane.

Unas vueltas más tarde y tras el aviso de su equipo en el muro de línea de meta, Viñales completó el ride through y pudo remontar hasta la undécima plaza, rascando unos puntos. La llegada de Europa supone para el español un nuevo resurgir ante su afición. Su objetivo es meterse en la lucha por el mundial donde se encuentra su compañero de equipo, por lo que quiere decir que la moto tiene la competitividad necesaria para estar entre los mejores. Maverick sacará su mejor artillería para conseguirlo y demostrar que la Yamaha ha vuelto para quedarse.