Nos encaminamos a una nueva semana con la llegada del gran premio de Austria el próximo fin de semana, pero el gran premio de Brno 2019 no dejó indiferente a nadie por muchos motivos. Hubo muchos piques, mucha tensión y sobretodo muchas claves de como se puede esperar la segunda parte de la temporada en la categoría reina.

Una carrera que empezaba prometiendo emoción ya que debido al agua que cayó previamente había zonas de la pista secas y otras con agua y pensando lo primero en la seguridad de los pilotos la carrera se retraso para garantizar la seguridad de los mismos. No paró de llover durante el fin de semana en Brno pero por suerte para muchos el tiempo dió una tregua para la disputa de la carrera.

El líder del mundial Marc Márquez, partía desde la pole que consiguió con otra de esas exhibiciones que tan acostumbrado tiene a los aficionados, tras lograr un gran tiempo en mojado llevando puestos los neumáticos de seco. El vigente campeón del mundo, sabía que ganar en una pista más propicia para sus rivales era dar un golpe sobre la mesa, y desde el primer momento salió dispuesto a administrar el liderato de la prueba para apretar en el momento justo y distanciar aún más a sus rivales en la carrera por el título. Le salió perfecta la jugada a un Márquez que no tiene pinta de que nadie le pueda frenar y que su gran racha ha hecho como ha recalcado Dovizioso entrar en crisis a los pilotos y equipos rivales.

Precisamente las Ducati con el propio Andrea Dovizioso a la cabeza son uno de los grandes derrotados de este gran premio. En el equipo italiano se habían marcado esta carrera como una de las esperanzas para recortar distancia al líder del mundial, y han comprobado que ni en circuitos más favorables para ellos pueden con un líder que cada día se muestra más intratable. Golpe duro para los italianos que saben que el próximo gran premio de este fin de semana en Austria es una auténtica final para ellos ya que llegan al circuito que mejor se adapta a su moto y no conseguir la victoria y recortar distancia en el campeonato serían prácticamente decir adiós a las esperanzas que puedan quedarles. 

Otro de los equipos que volvió a defraudar en Brno fue Yamaha. Los japoneses que se habían marchado con muy buenas sensaciones a las vacaciones después de unos grandes resultados conseguidos por sus pilotos Viñales en el equipo oficial y Quartararo en el equipo satélite, se presentaban en el trazado checo con la esperanza de seguir con la misma dinámica pero nuevamente defraudaron y sus pilotos se quedaron muy lejos del podio y de cualquier posibilidad de ganar la carrera. Muchos son los que piensan incluidos sus propios pilotos que en el box del equipo deben ir pensando más en la próxima temporada con el objetivo de conseguir volver a aspirar a todo, algo que a día de hoy parece imposible.