El año 2015 supuso la explosión de Andrea Iannone en la categoría de MotoGP, con un pilotaje arriesgado pero espectacular, que le metió de lleno en más de una pelea, sobre todo en la recta final del campeonato. Por lo que el año 2016 apuntaba todavía más alto para el piloto italiano, aunque la realidad no fue esta y la temporada se complicó mucho más de lo esperado.
Peor arranque imposible
El italiano empezó el año en le centro de las críticas, y no sin razón. En las primeras dos carreras Iannone no logró llegar a la línea de meta, yéndose al suelo en dos ocasiones en las que involucró también a su compañero de equipo, Andrea Dovizioso. En la primera carrera en Qatar, Iannone se fue al suelo cuando peleaba con su compañero de box por la primera plaza en los primeros compases de la carrera, y en Argentina, se llevó por delante a Dovi en la última vuelta, provocando el enfado de su equipo y la llamada de atención de la marca italiana.
Con el pronto fichaje de Jorge Lorenzo por Ducati para la próxima temporada, uno de los dos Andrea estaba destinado a abandonar el barco italiano, y teniendo en cuenta que la marca roja ya tenía una leve preferencia por el ex de Honda como piloto de equipo, las dos primeras acciones de Iannone en el arranque del campeonato acabaron por decantar la balanza por completo.
Vuelta al podio
Iannone, sin embargo, ha demostrado a lo largo de los años que es un piloto de extremos, y a pesar de los dos desastres iniciales, el piloto volvió a lo grande en la tercera carrera, demostrando ser el gran piloto que había terminado la temporada 2015 de forma espectacular. En Austin, ante el dominio invencible de Márquez en el trazado americano, Andrea lograba su primer podio del año al acabar tercero.
La irregularidad de esas primeras tres carreras marcaría el inicio de temporada del piloto italiano, que clasificaría séptimo en Jerez pero volvería a quedarse fuera de carrera en Le Mans. En Mugello, su casa, volvería a la gloria por partida doble: sumando su segundo podio del año y siendo el único piloto italiano en hacerlo en la capital del motor.
En el centro de la polémica
Su gran carrera delante la afición, sin embargo, no ayudaría a que el piloto italiano se centrase, y en Montmeló volvió a llevarse a otro piloto por delante debido a una acción temeraria: en esta ocasión fue a Jorge Lorenzo, quién sería el primero de la temporada en criticar dura y públicamente a Iannone y a sus acciones ya cuestionadas por cierta parte de la parrilla y de la afición.
Esta acción en Montmeló también le supuso un castigo, saliendo último en un Gran Premio de Assen bajo la lluvia. En esta ocasión, las malas condiciones meteorológicas le echaron una mano, ya que una carrera con doble salida permitió al de Ducati terminar quinto y coger un buen saco de puntos, resultado que también repetiría en la última carrera en Alemania antes del parón veraniego.
Llega su primera victoria
Las vacaciones de verano sentarían bien a un Iannone que volvía por la puerta grande a la competición. En Austria, Iannone puso la guinda a un fin de semana espectacular para Ducati donde la marca italiana logró doblete. Andrea Iannone se convertía en el quinto ganador diferente de la temporada en la categoría reina, y lograba su primera victoria en MotoGP. Además, lograba llevar a la escudería italiana a lo más alto seis años después, desde que lo hiciese Casey Stoner en 2010.
Sin embargo, la victoria no logró brindar la regularidad da Iannone, que tras un discreto octavo lugar en Brno, volvía a irse al suelo en Silverstone. Sin embargo, Misano acabaría de marcar la temporada para el piloto italiano, al sufrir una caída en entrenamientos que le provocó una lesión en la vértebra T3.
Final de temporada truncado
El italiano probaría en Aragón volver a competir, pero su estado físico no se lo permitiría, perdiéndose no sólo el Gran Premio en Motorland, sino también los de Japón y Australia.
En Sepang volvería a la competición en una carrera bajo el agua en la que pelearía como un jabato por la victoria hasta quedarse sin opciones a siete vueltas para al final tras irse al suelo. La última carrera en Cheste describiría perfectamente la temporada de Andrea Iannone con la suma de su cuarto podio de la temporada al volver a sumar un tercer lugar.
Una nueva era
La irregularidad de Iannone, así como la mala suerte en el tramo final de temporada en relación
a su lesión, impedirían al piloto italiano pasar del noveno lugar en la clasificación general del campeonato, resultado alejado de los objetivos al arrancar el año. Sin embargo, Iannone pudo despedirse de la escudería italiana antes de adentrarse en su nueva aventura en Suzuki de la mejor manera y a lo grande: logrando en Brno que el rojo de la Ducati volviese a lo más alto seis años después.