Llega la época donde hay que sufrir en la pista. Los rallys son más largos, el físico es clave . Entramos en la temporada de tierra batida con el ATP 250 de Casablanca.

El finalista del año 2012, Albert Ramos, que cayó ante Pablo Andujar. No comenzó con garantias el duelo frente a Mikhail Kukushkin. Desde el principio fue contracorriente acusado de un break. Estaba cometiendo infinitos errores no forzados y en ningún momento conseguía dominar con su arma que es el drive. Por su parte, Mikhail no estaba jugando a un nivel grandioso, únicamente jugó con la paciencia de Albert salvando los momentos más duros y debilitando a su rival por parte anímica.

El cabeza de serie número siete del torneo, solo dejó ganar un juego al catalán para ganar por 6-1 y con tres roturas en el bolsillo. Sin embargo, en el segundo set Albert Ramos Vinolas, lo único que podía hacer era mejorar. Así lo demostró en ese primer juego del segundo parcial, donde consiguió romper por primera vez el saque del nacido en Rusia. Además, la derecha estaba corriendo más y con el saque obtuvo más confianza, el kazajo debía subir su nivel ya que Ramos lo había subido.

Ninguna estructura de juego obsequiaba el kazajo sin querer jugar puntos largos ya que el tenista catalán se estaba encontrando mucho más solido en ese fondo de pista sin apenas fallar. La dinámica de juego siguió con la inseguridad de Kukushkin donde Albert aprocechó para realizar otro break y cerrar el set por un contundente 6-2. No estaba siendo un partido fácil para disputar. Los niños de una escuela tomaban asiento en una pista prácticamente vacia. Hasta ahí todo parecía normal, pero el problema era que en el desarrollo de los puntos gritaban y hablaban obligando a Mohamed el Jennati a advertirles en muchas ocasiones.

El comienzo del tercer set parecía que iba llevar la misma dinámica del segundo ya que Ramos Vinolas tuvo la oportunidad de romper el servicio. Sin embargo, Kukushkin con algo más de amor própio pudo salvar su turno de servicio y colocarse por delante.

No obstante, tras tener en varios juegos bolas de break y no aprovecharlas, el tenista nacido en Mataró sucumbió su saque con un Kukushkin mostrando el mejor juego del duelo y colocándose 3-1. En el siguiente juego tampoco pudo aprovechar sus opciones de break y el kazajo se sentó con 1-4 salvando las ocho bolas de rotura que tuvo su rival en el último set.

El séptimo cabeza de serie del torneo, validó su saque para derrotar a su oponente con un único break en el segundo set por 6-1, 2-6 y 6-3. Con esta victoria, Mikhail pisará  segunda ronda o octavos de final donde esperará al ganador del duelo entre el español Dani Gimeno Traver y el tunecino Malek Jaziri.