Día de competición muy intenso en esta nueva edición del Mutua Madrid Open. Tras una primera toma de contacto este pasado lunes, la jornada del martes servía para concluir la primera ronda y dar los primeros coletazos a la segunda. Dicha segunda ronda echaba a rodar con un auténtico duelo de titanes, dos jugadores de muy alto calibre, en diferentes momentos de forma, pese a todo, como son Grigor Dimitrov y Milos Raonic, miembros de la élite mundial. Esta fecha sería también de vital importancia para el tenis español; La Armada, todavía inmersa en la primera ronda, copaba hoy todos los focos ante sus comprometidos duelos iniciales. Tras la derrota, ayer, de Roberto Carballés, y la victoria de Feliciano López sobre Pablo Andújar, jugadores como Carreño, Bautista, Ramos, Verdasco o García-López saltarían a la arcilla madrileña, contando siempre con el cariño del público y finalizando sus citas con suertes distintas.

Raonic sorprende ante Dimitrov

Evidentemente, el partido estrella de la jornada era el choque entre dos auténticos "pesos pesados" del circuito ATP: Grigor Dimitrov y Milos Raonic. Dos jugadores acostumbrados a moverse en el Top Ten pero que, actualmente, viven inmersos en situaciones radicalmente diferentes, y con objetivos de diferente alcance. Dimitrov llegaba a Madrid como Nº4 mundial, solo por detrás de Nadal, Federer y Zverev. Sus recientes actuaciones le han ayudado a conservar un complicado lugar en el ranking; acostumbrado a tener todos los focos sobre él, el de Haskovo muestra confianza en sí mismo, y se ve capaz de derrotar a cualquiera. Tras una buena gira sobre tierra batida, siendo semifinalista en Montecarlo y cayendo en cuartos de final en el Godó, Dimitrov buscaba un buen resultado en la capital española, donde defendía tercera ronda.

Su rival, desde luego, no se lo pondría nada fácil. Milos Raonic atraviesa por una etapa de reconstrucción. Superada ya su aparatosa lesión, que le hizo retroceder varios pasos en 2017, el canadiense ha vuelto al circuito fuera del Top-20, pero con ánimos y energías renovadas. Con un fantástico inicio de temporada, reflejado en esas siete victorias en sus nueve primeros partidos de Masters 1000, el natural de Montenegro se vio forzado a retirarse en Montecarlo para reaparecer, ahora, en Madrid.

La quinta edición de este "head to head", dominado hasta ahora por el europeo, con tres victorias sobre el americano, arrancó con una extrema igualdad proyectada sobre los rápidos juegos, carentes de historia y emoción. El primer set, dominado ampliamente por el sacador, mostró a un Raonic más entero, peligroso al resto en ciertas fases del parcial y que sentenciaría en los tramos decisivos gracias a un break en el undécimo juego. Tras solo cuarenta minutos de acción, Milos se anotaría el primer asalto por 7-5.

El segundo parcial rescataría la mejor versión de Grigor Dimitrov. Ante la evidente falta de contacto con la arcilla madrileña, un contacto que sí había tenido Raonic, el búlgaro necesitó de un período de adaptación, que supuso su derrota en el primer set. Dimitrov, acostumbrado a firmar actuaciones discretas en Madrid, se valdría de un único quiebre, en el cuarto juego, para conducir esta batalla a la tercera manga que, ahora sí, brindaría al público juegos más disputados, con los sacadores teniendo que emplearse a fondo para poder cerrar sus servicios. Al igual que en el primer set, Milos Raonic aprovecharía fases de duda de Dimitrov, siempre en momentos críticos, para decantar el partido a su favor. Fue nuevamente una solitaria rotura la que condicionaría el encuentro, una rotura que dejaría el choque decidido, ya que se produjo en el octavo juego, y que significó el 5-3. Sacando para ganar, el nacido en Podgorica confirmaría la sorpresa en la Arantxa Sánchez Vicario; 7-5 3-6 y 6-3 en dos horas de contienda. En los octavos de final, y en busca de seguir recuperando sensaciones, Raonic se medirá a su compatriota Denis Shapovalov.

Bautista, Ramos y Verdasco prolongan su estancia en Madrid

El primer turno de la jornada traería consigo un partido muy interesante entre Roberto Bautista-Agut y Jared Donaldson. El castellonense, Nº14 del tenis mundial, todavía no ha dado con la tecla para desatar todo su potencial, un potencial que podría hacerle alcanzar ese codiciado Top Ten, que hasta ahora se le ha resistido. Bautista, semifinalista en el Mutua Madrid Open en 2014, se mediría a un Donaldson situado en tierra de nadie, anclado en la mitad del Top-100 y sin indicios de mejoría. Pese al buen inicio del americano, que se llevó el primer set en el tie-break (7-3), el español tiraría de su característica garra para, con un doble 6-4, darle la vuelta al partido y certificar su pase a la segunda ronda, que se le resistió el año pasado en un durísimo debut ante Karlovic. En una reedición de los cuartos de final de Múnich, disputados el pasado viernes, Roberto Bautista se medirá al alemán Philipp Kohlschreiber, ganador de aquel duelo y, a la postre, finalista del torneo alemán.

Albert Ramos también supo sufrir para sacar adelante su primer compromiso en el Mutua Madrid Open 2018. El de Mataró se ha visto obligado a volver a empezar; tras su decepcionante actuación en Montecarlo, torneo donde defendía la final lograda en 2017, el español retrocedió numerosos puestos en el ranking, un retroceso que le sacó del Top-40. Sin mostrar, ni de lejos, su mejor versión, el catalán necesita buenos resultados en torneos importantes para recobrar la confianza, y su primer paso podría ser aquí en Madrid, ante Peter Gojowczyk, uno de los "renacidos" del circuito ATP. Fue el alemán, Nº52 del mundo, quien se llevó un duro primer parcial, que se extendió más allá de la hora de duración, y que acabó en 7-5. Pese a este varapalo inicial, Albert Ramos emularía a Bautista y, tras mucho sufrimiento, remontaría el choque: 5-7 6-2 y 7-5. En segunda ronda espera todo un especialista sobre arcilla: Pablo Cuevas, que dejó fuera, en tres sets, al duodécimo preclasificado, Jack Sock.

Fernando Verdasco está de celebración. El madrileño, siempre motivado en estas fechas, derrotó al veterano italiano Paolo Lorenzi para sumar su victoria 500 como profesional, una cifra al alcance de muy pocos. Cuartofinalista en 2009 y 2012, Verdasco se une al selecto club formado por 47 jugadores, del que son miembro, todavía en activo, Federer, Nadal, Djokovic, Ferrer, Murray, Berdych, Robredo y Gasquet. Superado un encuentro relativamente sencillo, que finalizó en menos de hora y media, 7-5 y 6-4, el español lidiará con el argentino Leonardo Mayer, que fue capaz de batir en sets corridos a otro italiano, Fabio Fognini, 16º cabeza de lista.

Carreño y García-López dicen adiós

El día no fue perfecto para el tenis nacional, ya que otros dos jugadores fueron eliminados. Tras las derrotas de Carballés y Andújar el lunes, Pablo Carreño y Guillermo García-López fueron los damnificados el martes. El gijonés, de nuevo rozando el Top Ten, cayó claramente ante el croata Borna Coric por 6-4 y 6-2. El croata, con una victoria de mucho mérito, trata de revalidar los cuartos de final alcanzados aquí la pasada temporada; no será una empresa fácil para el joven jugador, que ahora tendrá que enfrentarse, por un puesto en octavos, con el alemán Jan-Lennard Struff, otro tenista que sigue ganando enteros.

Por su parte, Guillermo García-López no pudo superar al norteamericano Ryan Harrison. El estadounidense, prácticamente inactivo durante la gira sobre polvo de ladrillo, presente únicamente en el ATP 250 de Houston, donde fue eliminado en segunda ronda, reapareció a un buen nivel y en un gran estado de forma. Tras su victoria sobre el manchego, 6-4 y 7-6 (7), el de Luisiana se prepara ahora para un duelo fratricida que le enfrentará con el séptimo cabeza de serie, John Isner, campeón, a sus 32 años, del Masters de Miami.