Sharapova ha dejado de contar las derrotas  y ha empezado a mostrar su mejor versión anticipando el segundo Grand Slam del año, Roland Garros.  El encuentro en Roma entre Sharapova y Cibulkova deparaba de inicio una alta tensión personal más que deportiva. Esto en relación a los comentarios que Dominika Cibulkova, había hecho sobre la cinco veces ganadora de Grand Slams, al resultar positivo en un dopaje. El último encuentro entre ambas, fue hace más de cuatro años, cuando Cibulkova resultó ganadora en el Abierto de Australia del 2014.

La tierra batida de Roma era testigo de un duelo de gladiadoras, en el que Cibulkova rápidamente pondría a Masha contra la pared con tres juegos ganados. Estos tres juegos ganados de Cibulkova, lejos de ser resultado de su virtud, serían el efecto de errores no forzados de Sharapova. El servicio de Sharapova la regresó al partido para de tiro directo (Ace), ganar su primer juego. Pero Cibulkova  ampliaría la ventaja a cuatro juegos, y después a cinco.  Cibulkova serviría por la primera manga, Masha ganaría dos juegos más, pero aun así perdería la primera manga frente a Cibulkova  (6-3).

Masha reaccionaría en la segunda manga. El servicio de Sharapova sería su mejor aliado, tal cual con su quinto tiro directo (de un total de nueve en todo el partido) se adelantaría. Masha ganaría su primer juego, para empezar liderando la remontada.  Cibulkova  igualaría a tres, pero en el juego decisivo Masha logró quebrar y liderar cinco a tres.  Sharapova sabía que era todo o ir a empacar, cedería un juego ante una perseverante Dominika (para ganar cuatro juegos), pero al final una doble falta, le daría a Sharapova la segunda manga (6-4).

Sharapova dirigiría toda la agresividad de su servicio a ponerse arriba en la tercera manga, dos juegos a cero, justamente con su tiro directo número ocho. Cibulkova ganaría un juego más, pero ya Sharapova entreveía la siguiente ronda, poniéndose adelante cuatro juegos a uno. Cibulkova, más impulsada por la dignidad que por un despliegue de juego eficiente, ganó un juego más, pero sería Sharapova, quien se pondría adelante cinco a dos, y con tres oportunidades de punto de partido (40/0) Masha sostendría con su típica mirada fija en su rival, se llevaría la tercera manga y el partido en Roma (6-2).

Maria Sharapova enfrentará a la que resulte ganadora entre Garbiñe Muguruza y Daria Gravilova.