El circuito femenino de tenis se verá afectado este año por algunos cambios realizados por la WTA. Este fin de semana pasado se anunciaron las modificaciones que se van a llevar a cabo este 2019 en el calendario.

Como incorporación más relevante destaca el torneo de Zhengzhou, que empezará la semana siguiente al US Open. Este nuevo torneo dará inicio a la gira asiática, que termina con el Shenzhen Open.

APG, Central Plains Tennis Center y el Abierto de China han sido los principales responsables de la adhesión de este nuevo torneo asiático que ofrecerá 1 millón de dólares en premios. Se ha acordado que esta cifra aumentará a 1 millón y medio de dólares en 2020. Además, este torneo constará de nuevas instalaciones con tecnología punta y un estadio con capacidad para 8.000 personas. Los planes de los organizadores son que este estadio esté listo para el próximo año.

Por otro lado, el torneo de New Haven dejará de disputarse a partir de este año. New Haven dejará de ser uno de los destinos tenísticos más importantes de Estados Unidos tras 21 años en el circuito WTA. El torneo se vio afectado por la marcha de su principal patrocinador, hecho que hace inviable su modelo financiero y por lo tanto su participación en el circuito. Desde la WTA ya trabajan para buscar un remplazo.

Otros cambios significativos que se aprecian en el calendario son la incorporación de los torneos de Lausana y Jurmala. El torneo de Lausana, Suiza, dará comienzo tras el Wimbledon en la semana del 15 de julio. Y el torneo de Jurmala, Letonia, arrancará en la semana siguiente al de Lausana. Estos dos torneos remplazan el Moscow River Cup y el Damas Gstaad, respectivamente.

El Abierto de Jurmala nace como el primer torneo de tenis en Lituania. Una expansión que favorece al tenis femenino como aseguraba el presidente de la WTA, Steve Simon. Este afirmó que estos nuevos torneos suponen una nueva fuente de ilusión, ya que ayudan a presentar un calendario robusto para este 2019.