Más allá de la coincidencia entre su pasado camotero y su regreso al cuadro que lo vio nacer –Guadalajara-, la actuación del zamorano se ha dado bajo una ínfima luminiscencia del cuadro tapatío que, sumada a la poca lucidez y criterio de su directiva, ha convertido su entorno en una batalla inconquistable, sufrida, tétrica y de final poco misericordioso. La aparición de Víctor Hugo Hernández ha sido castigada de sobremanera.

La malaria que ha acaecido sobre el seno de occidente ha arrojado a la hoguera a tipos como el mismo Víctor Hugo, un tipo que parecía destinado a triunfar y que, por lo contrario, no ha conseguido figurar en el equipo más grande del fútbol mexicano.

La estampa del cancerbero mexicano ha vuelto a figurar en un encuentro entre poblanos y tapatíos.

La primera ocasión, el Domingo 2 de Septiembre del 2012, partido desarrollado en el Omnilife y que contaba en los banquillos con la presencia del exiliado John Van't Schip -por parte del Guadalajara- y de Daniel Guzmán -del lado camotero-. El encuentro finalizaría con empate a un gol; las anotaciones de aquél partido correrían a cargo de Roberto Chávez, -con un certero cabezazo tras el cobro de un tiro de esquina- y de Luis 'Vaquerito' Morales -ahora jugador de Pachuca- por parte del Rebaño Sagrado. 

La segunda ocasión, el 17 de Febrero del presente año. En este duelo, el cuadro de la Angelópolis contaba nuevamente con Víctor Hugo en la portería; los goles fueron anotados por Félix Borja y, sesenta segundos más tarde, por Marco Fabián quien, al contrario de Hernández, no ha visto actividad en el encuentro disputado ayer, en el Omnilife, por estar cocinando su inminente traspaso al fútbol del extranjero.

Y si hubiera que sumarle otro dato anecdótico, Ricardo Arellano ha sido el árbitro central de estos últimos dos encuentros entre poblanos y rojiblancos.

Con actuaciones destacadas en primera división del balompié nacional y en competiciones internacionales (Copa Nissan Sudamericana), la titularidad de Víctor Hugo Hernández vuelve a hacer acto de aparición, por tercera ocasión, con una franja de por medio.