El sábado 19 de abril de 2014 es un día que los aficionados cementeros dificilmente olvidarán, ya que Monarcas Morelia, jugando un buen futbol, goleó 5-1 a un Cruz Azul que no vio por dónde hacerle daño a los locales. Esta fue una noche de olvido para el equipo de Luis Fernando Tena, ya que se encontraban como líderes del Clausura 2014, pero la derrota les costó caro en lo anímico.

Un partido para el olvido

Un encuentro parejo y peleado en los primeros minutos. Al 17', llegó Aldo Ramírez con un disparo potente y puso el primero de la noche. Más tarde, Hector Mancilla hizo el segundo para Monarcas y el cuadro azul empezó con problemas en su defensa.

Los visitantes no tardaron en anotar. Al 42', el camerunés, Achile Emaná, pondría el esférico al fondo de la portería de Carlos Rodríguez y, con este tanto, pensábamos que Cruz Azul había despertado. Pero las cosas no fueron así, al minuto 45, el portero cementero, Guillermo Allison, cometió un falta en su área y Mancilla cobró la pena máxima para el tercer tanto en el marcador.

En la segunda mitad, "La Maquina" comenzó con el control del esférico, hiló jugadas importantes y no supo definir en momentos claves del encuentro. Los errores le costaron al equipo de Tena y, al 76', en una descolgada, Duvier Riascos mandó el balón al fondo de la portería de Allison y puso el cuarto de la noche. Morelia ya era superior a los cementeros.

Más adelante, al 87', Oscar Fernández remató de cabeza y terminó con un Cruz Azul que no vio por dónde hacerle daño al cuadro de Angel Comizzo. Monarcas logró el 5-1 en casa y consiguió meterse a puestos de Liguilla.

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Sobre el autor
Diego Farell
Soy un cronista deportivo egresado de la Raúl del Campo Jr. Llevo cinco años en los medios de comunicación.