La victoria de Santos Laguna sobre Lobos BUAP de alguna manera estaba presupuestada, pues en teoría era normal que el actual campeón del país superara en su estadio, al club que tuvo que pagar la cuota administrativa para permanecer en una liga de la cual había descendido el semestre pasado.
Pero como es un deporte impredecible, los licántropos dieron la sorpresa y se fueron al frente en el marcador aprovechando las desatenciones santistas ocasionadas por la falta de adaptación de la nueva línea defensiva. Rabello marcó el tanto al minuto 8.
Previo al descanso, los laguneros reaccionaron y entendieron que tenían que jugar por la banda y enviar trazos largos, por ello Robert Dante Siboldi ingresó de cambio al retornado Carlos Orrantía, quien con dos minutos en la cancha mandó un centro aéreo para que Lozano empatara el partido a pesar de pegarle ‘machucado’ a la pelota.
Nueve minutos después, Brian Lozano trazó un balón largo que Jonathan Rodríguez controló y con su velocidad se perfiló rumbo al arco de José Antonio a quien superó para darle la victoria al equipo local.
Cuatro salvadas del portero Carlos Acevedo y una falla en el área chica de Michael Orozco impidieron que los de la BUAP anotarán más goles, mientras que la oportuna intervención defensiva de los Lobos y de un poste ante un tiro de Lozano impidieron que Santos aumentara la cuenta en el marcador en un juego que tuvo demasiadas emociones para ser de jornada uno.
Al final, Siboldi recalcó en la conferencia de prensa que no regañó a sus jugadores, sino que se dieron cuanta mediante el diálogo para salir decididos en el segundo lapso con una mejor estrategia y así hacerle daño al rival.
“Debíamos jugar un poco más rápido, era lenta la transición de defensa-ataque, entonces teníamos que jugar más rápido, de ser un poquito más intensos y ser más agresivos en la recuperación en la zona dónde se perdió la pelota. No manejamos a gritos, simplemente nos ponemos de acuerdo y tratamos de que ellos lean e interpreten, que tengan lectura de lo que pasó en el juego para poder ponernos de acuerdo y corregir. Se dieron cuenta que nos faltó un poquito más de intensidad en la marca. En el segundo tiempo salimos a presionar más, a tener más dinámica, poder cambiar más de ritmo de medio campo hacia adelante, entonces creo que ahí fue que hicimos la diferencia para poder hacer los goles”.
El estratega uruguayo reconoció que están a punto de cerrar la negociación con otro defensa central y que siguen las pláticas con un mediocampista para apuntalar al equipo, al que le reconoció su entrega y sacrificio, aunque aceptó que les falta bastante para alcanzar el potencial que los llevó a ser campeones.
“No estamos duros, nos falta ritmo de juego, yo quería para mi agrado tener una o dos semanas más para tener más partidos y adquirir ese ritmo, pero no hay excusas, desde la primer fecha teníamos que salir con todo, tratar de jugar bien, creo que en términos generales fue aceptable el rendimiento y nos alcanzo para ganarlo. Tenemos que seguir mejorando”.
Desde la banca contraria, el debutante Francisco Palencia destacó que vinieron a Torreón conscientes de que están armados para mantener la categoría, aunque señaló que fueron errores puntuales los que ocasionaron su derrota.
“Somos un equipo que quiere ganar y tener la pelota de forma estructurada y organizada. Nos faltó el gol. Nos defendimos hasta cierto punto bien, tuvimos errores puntuales: el primer gol le pega muy mal Lozano y la desvía mi defensa y se clava. En el segundo cuando viene el balón la peina Maza y le cae Rodríguez y define bien”.
A pesar de ello, el ‘gatillero mexicano’ se fue con la idea de que fue un partido tan disputado que cualquiera pudo haberse llevado la victoria, por lo que se va triste pero consciente de que los futbolistas entenderán su idea de juego y poco a poco la plasmará en la cancha por más tiempo y no solo en fragmentos del primer tiempo.
“El equipo vino a plantarle cara al campeón, creo que el equipo jugó bien al fútbol, salvo en algunos lapsos que no tuvimos la pelota pero creo que en general fue un partido muy parejo, no hubo un gran dominio ni de ellos ni de nosotros. Aprovecharon ellos las oportunidades de gol que tuvieron y ahí fue la diferencia”.
Con este duelo de contrastes marcado por cambios sustanciales de las plantillas comenzó la temporada para dos equipos que sin duda, darán de qué hablar durante el torneo, porque al menos en este primer juego mostraron la intensidad suficiente para complementarse con la calidad de sus elementos, misma que saldrá a relucir cuando estén física y futbolísticamente a plenitud de sus condiciones. El resultado le otorga a Santos su primera victoria del torneo y les da respiro para recuperar la confianza tras semanas turbulentas, mientras que para Lobos, únicamente le sirve de bálsamo que se presentaron en la casa del campeón y por varios momentos lo pusieron en predicamentos.