El Puebla jugó de forma inteligente, fue precavido y concretó la única que tuvo en el segundo tiempo, por lo que fue más que suficiente para derrotar 1-0 a Tigres en el mismísimo Estadio Universitario, cortándole una larga racha sin perder en dicho recinto.

El primer tiempo fue de un vaivén interesante en donde hubo oportunidades en ambas áreas, pero ninguna se concretó.

Las emociones las inició Carlos Salcedo al anticiparse a primer poste en un centro proveniente de tiro de esquina que se estrelló en el travesaño.

Minutos más tarde, el Puebla generó dos claras opciones en contra del arco de Nahuel Guzmán, primero desde los pies de Acosta y después con Navarro, pero los dos fueron atajados por el guardameta argentino.

Tigres respondió y ahora fue el turno de Lucas Zelarayán al meter el bombazo que reventó el horizontal y, posteriormente, Gignac mandó su cabezazo a nada del primero, pero Nicolás Vikonis se extendió para rechazar la pelota hacia un costado.

Otro de los que también lo intentó fue el ‘Chaka’ Rodríguez mediante el disparo lejano que se fue ligeramente por arriba.

Para el segundo tiempo la intensidad vino a menos y el juego se tornó trabado en el medio campo. A raíz del minuto 60, el equipo de Ricardo Ferretti tomó el mando del partido pero fue inefectivo a la hora de desbordar por los costados o generar asociación por el centro.

El gol del silencio

Dentro de los minuto finales en jugada a balón parado, Lucas Cavallini, quien había ingresado de cambio, se alzó por los aires para meter el sólido cabezazo que, pese al desvío de Nahuel, no pudo hacer la atajada y el Puebla marcó el único tanto de la noche, callando a un ‘Volcán’ incrédulo que no podía creer lo que estaba pasando.

La única respuesta de Tigres aconteció mediante el tiro libre directo de Gignac que se estampó en la barrera.

Para el fin de semana, Puebla recibirá a León y Tigres disputará el Clásico Regio ante el Monterrey.