¿Refuerzos desaprovechados?

De los cuatro refuerzos que Necaxa contrató de cara al CL17, ninguno pudo hacerse de un puesto en el once titular.

¿Refuerzos desaprovechados?
(Fotos: VAVEL)
rodrigomg
Por Rodrigo Martinez

Se dice que cuando se contrata a un refuerzo es para fortalecer al equipo, generar competencia interna, y que compita por un puesto de titular; pero hay ocasiones en las que simplemente el jugador recién llegado no es capaz de plantarle cara a los que ya estaban, las lesiones atacan o simplemente no es del total agrado del entrenador.

En promedio cada refuerzo jugó apenas 281 minutos en todo el torneo. 

Al ser el primer refuerzo en ser anunciado, parecía que Nicolás Maturana tendría una acoplación más amena al equipo y por tanto, más minutos sobre el campo para ganarse la confianza de Alfonso Sosa. Sus actuaciones fueron destacadas en Copa MX al igual que sus primeras intervenciones en Liga y con ellas se ganó rápidamente el cariño de la afición rojiblanca.

Nadie se explicaba que no recibiera una oportunidad en la alineación titular, tomando en cuenta la baja de juego de Jesús Isijara y la necesidad del equipo por un jugador desequilibrante como él. Al final de cuentas, disputó 10 encuentros, la mayoría entrando en los últimos minutos y sólo dos de ellos como titular; anotó un golazo y provocó un auto-gol, fue así que su trabajo en el campo se tradujo en puntos para los Rayos.

El argentino, Maxi Barreiro, se convirtió en el segundo refuerzo y llegó a México con un gran cartel después de haber sido campeón goleador en la Liga Ecuatoriana. Con su primer tanto, apenas en la Jornada 3 contra Pachuca, parecía que el destino le volvería a sonreír, no obstante, con el pasar de los partidos y con sus disparos a los palos o desviados por centímetros, poco a poco se consumió la confianza del técnico rojiblanco. Sumó dos goles en 614 minutos repartidos en 16 enfrentamientos, sólo en cinco de ellos fue titular.

En los últimos días de diciembre pasado, Jonás Aguirre fue anunciado como el tercer refuerzo. El argentino vestiría por primera vez una playera que no fuera la de Rosario Central. Al igual que las otras incorporaciones participó primeramente en la Copa, donde hizo gala de su velocidad y así pudo ganarse un puesto en el once inicial; debutó en Liga en la fecha 4 frente a Pumas colocándose como volante izquierdo, aunque tendría más actividad como lateral zurdo. Pudo jugar en cuatro ocasiones, dos de ellas como titular y disfrutó de 235 minutos de juego.

En febrero y tras la salida del defensa central, Fernando Meza, en los últimos días del mercado de transferencias invernal, los hidrocálidos se vieron obligados a contratar un último elemento que cubriera esa baja en la zaga y rápidamente contactaron a Emilio Mac Eachen, quien llegó proveniente del Club Sud América de Uruguay. Al ser tapado por el gran trabajo de la dupla González - De Luna, el charrúa apenas pudo jugar 62 minutos, distribuidos en cuatro juegos, ninguno de ellos como titular.