No hubo nube alguna que impidiera al sol brillar en su totalidad sobre el Estadio Olímpico en Ciudad Universitaria. Con su uniforme negro, Monterrey se presentó en la cancha con siete cambios respecto a lo que siempre presenta. Por su parte, Pumas apareció en el campo con su playera blanca en busca de un resultado positivo.
Los primeros minutos fueron totalmente Rayados: no habían pasado 60 segundos cuando Jorge Benítez entró por la banda izquierda, recortó a la defensa y dejó el balón a Neri Cardozo quien remató sin la puntería necesaria pues Alfredo Saldívar despejó el balón con su pie izquierdo. Instantes más tardes, Avilés Hurtado volvió a avisar con un disparo que no llevaba peligro.
Fue hasta el minuto siete que Pumas decidió llegar a la portería rival con un pase lejano que Abraham González puso para Formica, pero este no llegó. Hugo González había dudado en salir pero todo terminó en tiro de esquina. Sin embargo, la jugada más peligrosa para los auriazules llegó al minuto 15 con un cabezazo de Formica al ángulo inferior izquierdo que provocó el lance del arquero rival para salvar su marco.
Al cuadro de Antonio Mohamed poco le importa que el balón pase más tiempo con el rival: necesitan pocos pases para llegar al área. En los momentos restantes del encuentro, Pumas dominó el balón pero las acciones claras no llegaron. Monterrey se dedicó a esperar y robar balones para dejar mano a mano a sus delanteros, pero la defensa y el portero auriazul estuvieron atentos para que el partido quedara cero a cero durante la primera mitad.
El inicio de la segunda mitad fue una calca de la primera, Monterrey volvió a adueñarse de las acciones y Pumas no respiraba: Jorge Benítez tomó el balón en la banda izquierda, recortó y disparó, pero el balón salió rebotado y fue rescatado para que Efraín Juárez le pagara; sin embargo, el disparo salió por arriba de la puerta de Saldívar. Segundos más tarde, Avilés tuvo el primero en sus manos ya que Cardozo le puso un centro medido y el colombiano lo mandó para afuera.
Después, el partido regresó a su ritmo semi lento, en el que ambos trataban pero no lograban nada. Sin embargo, al minuto 71 Gallardo desbordó por su banda izquierda, sacó centro y la defensa despejó. Con esto, el medio campo rayado recuperó el esférico y con tres pases, Avilés Hurtado estaba de frente a Saldívar. El delantero intentó dar el famoso “pase de la muerte” pero Alcoba intervino, aunque el balón le volvió a caer al mismo Hurtado quien no dudo en disparar y anotar el primero para su escuadra.
Pumas trató de despertar y dos veces Hugo González tuvo que volar para salvar a Monterrey. La primera vez fue en un tiro de Escamilla, quien había entrado por Alan Acosta, al ángulo superior derecho del portero, pero el gol no cayó. La segunda fue en un tiro de Formica en el que trató de techar a Hugo, pero el ex americanista reaccionó de buena forma.
En los minutos finales, ambas escuadras hicieron cambios tácticos para lograr sus respectivos objetivos. Monterrey se echó para atrás y Pumas intentó con centros y algunos tiros empatar el marcador. Pero, o el delantero llegaba tarde, o había fuera de lugar. Rayados no se desacomodó y todavía a unos segundos de terminar el encuentro, Benítez pudo anotar un segundo gol, pero no se pudo. Con este resultado, los regios llegaron a 30 unidades para seguir en la cima de la tabla general. Por su parte, Pumas llegó 9 derrotas en 14 juegos y se mantienen en la posición 16 de la clasificación.