Y Tigre volvió a perder. Esta vez, ante Banfield en el estadio Florencio Solá por 1-0, cosechando su tercera caída en solo cuatro presentaciones del torneo: 3 puntos sobre 12 disponibles, y más preocupación en Victoria, que se había apaciguado tras el 4-0 a Racing.

Luego de consumado el traspié, salió a enfrentar los micrófonos Fabián Alegre, que en primer lugar se refirió al árbitro Pablo Díaz: "Nunca hablo de los arbitrajes. Creo en su buena fe. Pero si se equivocaron en convalidar el gol de Salcedo, es una desgracia para nosotros”.

"No me gusta hablar de los árbitros"

“Me voy conforme por la entrega de los jugadores en la cancha, quienes no bajaron los brazos en ningún momento”, prosiguió el Cabezón, mimando a sus dirigidos por su sacrificio, que en el segundo tiempo estuvieron cerca del empate.

"Los jugadores nunca bajaron los brazos"

Su análisis del encuentro fue el siguiente: “Fue un partido parejo en el que Banfield jugó mejor durante el primer tiempo. Ya en el complemento, a pesar de los disparos del rival que pegaron en el poste, Tigre revirtió la situación y fue superior. Fuimos a buscar el gol y contamos con situaciones claras que no logramos concretarlas”.

"No supimos concretar las jugadas que tuvimos"

“Hoy tuvimos más situaciones de gol que ante Racing y paradójicamente no lo logramos convertir, a diferencia del encuentro anterior en el que concretamos las cuatro oportunidades que tuvimos”. lamentó el entrenador sobre la falta de puntería de sus delanteros, uno de los défecits más marcados desde que asumió.

Para finalizar, el DT se confía en revertir la situación, ya que su conjunto le respondió a pesar del marcador: “A pesar de la derrota, me voy con la sensación que dejamos una buena imagen. Hay que agachar la cabeza y trabajar”.