Angola: objetivo, los cruces

El campeón africano se presenta al Mundial de España con la obligación de pasar la primera fase y dejar una buena imagen en los cruces. Llegan como campeones de Africa y el objetivo es igualar la décima plaza de Japón 2006, aunque será una empresa complicada.

Angola: objetivo, los cruces
Angola disputó en partido de la ruta Ñ2014 | Foto: FEB.
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Por David García Martín

Angola tiene marcado en rojo el 30 de septiembre en el calendario. El país africano empezará ese día su andadura en el Mundobasket contra, a priori, la débil Corea, a la que deberían derrotar sin excesivas complicaciones. Será la participación número siete en un Mundial de baloncesto. Su primera aparición fue en el campeonato de 1986, donde terminaron vigésimos. Cuatro años más tardes acabaron décimo terceros y en 1994, décimo sextos. Se perdieron el Mundial de Grecia de 1998 y regresaron para no marcharse en Estados Unidos 2002, con la undécima posición. En Japón 2006 hicieron su mejor resultado al terminar décimos tras caer eliminados en octavos de final con Francia por un ajustado 68 - 62. En el último torneo, disputado en Turquía en 2010, finalizaron décimo quintos. En esa ocasión no tuvieron ninguna opción de estar entre los ocho mejores del torneo. En octavos de final se enfrentaron a Estados Unidos, que a la postre acabó siendo el campeón, y los destrozó con un contundente 121 - 66 con 19 tantos de Billups y 17 de Kevin Durant, ambos en menos 20 minutos disputados.

Nunca ha sido una selección destacada a nivel Mundial sin grandes resultados en los campeonatos, Angola ha dominado el baloncesto en el continente africano desde 1989, aunque llevan logrando medallas consecutivamente desde el torneo jugado en Egipto en 1983. Precisamente, ese año se disputó el Afrobasket en su país y cosecharon el primer oro de su historia. Desde entonces se han disputado 13 campeonatos africanos más con un balance de once títulos -incluído el de 2013 que le dio acceso al Mundobasket 2014 tras batir en la final a Egipto por 57 - 40-, una plata en Madagascar 2011 -después de perder en la final contra Túnez (56 - 67) con 21 puntos de Kechrid y 15 rebotes del madridista Salah Mejri- y un bronce en Senegal 1997 que cortó una rocha de cuatro oros consecutivos.

Pasar la primera fase y esperar

El sorteo para definir los grupos que se disputó el 4 de febrero de este mismo año fue benévolo con el combinado africano. Angola quedó encuadrada en el Grupo D junto a Eslovenia, Lituania, Corea del Sur, México y Australia. En principio, las dos selecciones europeas están por encima del resto, por lo que tan solo quedarían dos plazas en octavos para cuatro equipos. Corea del Sur es el equipo más débil de todos y su presencia en el Mundial es un premio pensando en el campeonato asiático de 2015. México, Australia y Angola deberían jugarse el pase a los cruces entre ellos. Así, los enfrentamientos directos entre estos equipos y la diferencia entre puntos anotados y puntos recibidos serán la llave para pasar de ronda o volver a casa tras acabar la primera fase.

En caso de clasificación, los cruces van con los cuatro clasificados del Grupo C. Todo hace indicar que Estados Unidos no tendrá rival en la primera fase, por lo que acabar cuarto en el D te condena, o te premia, con enfrentarte a los mejores jugadores del Mundo. En caso de finalizar tercero en la primera fase, el cruce debería ser contra Turquía o Ucrania. Dos selecciones, a priori, superiores a Angola, pero con más opciones de ganar de las que tendría a los norteamericanos.

Sin la estrella

Angola destaca por ser un equipo que nunca se da por vencido. Incansable y luchador serían los mejores adjetivos para definir a los norteafricanos, como ya se demostró en el partido preparatorio contra España en el que solo perdieron por nueve puntos (79 - 70). En ese partido amistoso el equipo africano fue superior al combinado de Orenga, que en la segunda mitad solo fue capaz de anotar 34 puntos por 42 de Angola.

Sin embargo, cuentan con un tremendo hándicap en su contra. La gran estrella del equipo, Carlos Morais, con 193 cm de altura ocupa la posición de escolta, tanto en la selección como en su club, no será de la partida en el Mundial de España. El jugador angoleño fue el líder del equipo en el pasado Afrobasket y logró el MVP, pero una lesión de rodilla le impide estar en la cita española. Cuenta con la experiencia que le otorgó el Mundial de Japón, donde Angola hizo el mejor resultado de la historia y Morais acabó promediando 9.6 puntos y casi el 50% de acierto en el lanzamiento de dos puntos. Además, el verano pasado estuvo probando con Toronto Raptors pero el equipo canadiense se deshizo de sus servicios antes de que empezara la temporada.

Sin Carlos Morais, el jugador que se encargará de llevar el liderazgo será Olimpio Cipriano. Es un escolta de 1.92 metros de altura y 32 años que destaca por sus penetraciones y tiro de media distancia. Sin embargo, sus porcentajes se pueden ver afectados por forzar acciones o por abusar del lanzamiento exterior, donde no es un gran especialista. En el pasado Mundial de Turquía promedió más de 14 puntos por encuentro. Otro de los componentes importante de los angoleños es Eduardo Mingas. Ocupa la posición de ala-pívot y da la opción al equipo de abrir el campo. En la ruta Ñ2014 cuajó un gran partido contra España y finalizó con 17 tantos y un tres de tres en el lanzamiento exterior, plantando cara al potente juego interior de España, que solo llevaba un partido de preparación.

Una de las facetas de Moore es la lucha por el rebote | Foto: FEB.

Otro de los ejes sobre los que gira Angola es el experimentado base Armando Costa. Con 191 centímetros y 31 años, es el encargado de canalizar todo el juego angoleño. Alrededor de él funciona todo el juego del equipo. Sube el balón, pasa y mueve al equipo pero no destaca en el aspecta anotador. Se perdió el último Mundial y en el de 2006 tuvo un paso testimonial con 1.5 tantos por choque. Deberá dar un paso al frente para que la baja de Carlos Morais no sea tan significativa. Además, de Armando Costa, el seleccionador angoleño cuenta con dos bases más en la plantilla. Gildo Santos es una de las jóvenes promesas para el futuro de la selección y el que debería ser el sustituto de Costa. El tercer director de juego es Milton Barros. Con apenas 1.83 de altura puede jugar tanto de uno como de dos, por lo que debería ser un recurso más para suplir la importante baja de Carlos Morais.

El otro jugador a seguir es el ala-pívot Reggie Moore. El exjugador de CB Illescas o UB La Palma, entre muchos otros, dispone de solo dos metros de altura para jugar en posiciones interiores. Es zurdo y destaca por un buen tiro de media distancia y una capacidad física que le permite pegarse en la lucha por el rebote. En el amistoso preparatorio para el Mundial contra España fue el más destacado con 17 puntos, 7 rebotes y un 80% en tiros de dos. Otro nombre que hay que apuntar es el de Yannick Moreira. El pívot es el único jugador de esta selección que lo hace fuera de su paáis. Moreira intenta la aventura americana y el pasado curso estuvo a las órdenes de Larry Brown en SMU Mustangs. El curso pasado, en la liga universitaria, acabó promediando 6 puntos, 3.9 rebotes, 51.5% en el tiro en apenas 13.5 minutos por encuentro.

Dorsal Nombre Edad Posición
4 Olimpio Cipriano 32 Escolta
5 Armando Costa 31 Base
6 Roberto Fortes 29 Escolta
7 Edson Ndoniema 23 Alero
8 Gildo Santos 24 Base
9 Valdelicio Joaquim 24 Pívot
10 Joaquim Gomes 33 Ala-pívot
11 Reggie Moore 33 Ala-pívot
12 Yannick Moreira 23 Pívot
13 Islando Manuel 23 Alero
14 Milton Barros 30 Base
15 Eduardo Mingas 35 Ala-pívot

Un hombre de confianza en el banquillo

Paulo Macedo será el encargado de dar las órdenes desde la banda a Cipriano, Armando Costa y compañía. El actual seleccionador angoleño está en el cargo desde mayo de 2012. De momento cuenta con un torneo internacional, el Afrobasket 2013, que no pudo acabar de mejor manera: oro y clasificación para el vigente Mundial. Sus éxitos con la selección no son explusivos en el banquillo. Macedo también defendió la camiseta como jugador con un gran bagaje: tres oros (1989, 1992 y 1993) y un bronce (1987) en los torneos continentales.