Dos equipos, un puesto en la final. Francia y Serbia se jugaban una medalla, ya que la victoria como mínimo aseguraba la plata. En la final esperaba Estados Unidos, que derrotaba a Lituania en la otra semifinal. Los franceses llegaban tras completar la mayor sorpresa del campeonato, eliminando a España en cuartos. Por su parte, los balcánicos barrían a Brasil por más de 20 puntos, en uno de los mejores encuentros del campeonato.
Teodosic al mando
El encuentro empezaba con Serbia en plan estelar, con un parcial de 0-4. Diaw, como ya ocurriera contra España, anotaba la primera canasta para los galos desde el triple. El equipo de Djordjevic usaba a la perfección a Raduljica. Francia reaccionaba con un mate de Gobert, que era el segundo jugador galo en anotar, después de Diaw. Un triple de Batum le daba la primera ventaja a los franceses (10-9). Un triple de Markovic ponía un parcial de 0-8, que obligaba a Collet a solicitar el primer tiempo muerto del partido (10-17). El técnico galo no encontraba de parar el vendaval ofensivo de los serbios. El primer cuarto finalizaba con un triple de Nicolás Batum, que dejaba el marcador en 15-21 para los serbios.
Milos Teodosic se marchaba al descanso con 18 puntos en su haber
El segundo periodo empezaba como el primero, con un lanzamiento de tres anotado por Milos Teodosic, que se iba hasta los 11 puntos. El encuentro se paraba por la lesión de Batum, que se retiraba al banquillo con un golpe en el rostro. Collet lo paraba en menos de tres minutos de cuarto, ya que Serbia había arrancado el cuarto con un 0-9, con un Raduljica estelar (15-30). Lauverge, con un palmeo, rompía el parcial serbio. Djordjevic solicitaba un tiempo muerto, tan sólo un minuto después del tiempo muerto francés, ya que los galos habían endosado un parcial de 4-0 en 60 segundos (19-30). Milos Teodosic volvía a aumentar la diferencia con una canasta y un triple, que ponía el marcador en 25-41. Kalinic se sumaba a la fiesta de Teodosic y levantaba al pabellón. Francia no se rendía y buscaba meterse en el partido con un triple de Jackson (29-43). La vuelta de Batum a la pista daba nuevos aires a Francia tanto en ataque como en defensa. Al descanso se llegaba con un marcador favorable a los serbios (32-46).
Oda al baloncesto
Teodosic no faltaba a su cita con el triple en la primera acción del tercer cuarto. Respondía en la siguiente jugada Batum también desde el perímetro. Diot cogía los mandos del cuadro galo y con una bandeja acababa con la sequía anotadora francesa, pero un inspirado Bjelica devolvía la ventaja a los 16 puntos (37-53). El partido perdía ritmo y las faltas se acumulaban. Djordjevic introducía nuevamente en pista a Teodosic, después de un par de minutos de descanso. Nenad Krstic, con dos canastas consecutivas en el poste, ponía una distancia de seguridad (41-57). El tercer cuarto concluía con un gancho encestado por Raduljica (46-61).
Batum, con 35 puntos, no pudo conseguir el milagro galo
Los diez últimos minutos se iniciaban con un parcial de 5-0, que obligaba a parar el choque a Djordjevic a los 40 segundos (51-61). Al igual que el tercer cuarto, la velocidad del juego era más lenta que en la primera parte. Los nervios empezaban a hacer acto de presencia en el Palacio de los Deportes. Collet solicitaba tiempo muerto para explicar las nuevas jugadas a realizar. Un triple de Diaw reducía la diferencia por debajo de los diez puntos (54-63). Los galos se metían de lleno en el encuentro con un nuevo triple de Batum, pero Raduljica, en la jugada más extraña del torneo ponía el 57-65. Djordjevic lo paraba a falta de 5:16 para el final, después de que Fournier volviera a anotar un triple (61-65). Bogdanovic pagaba con la misma moneda a Francia desde la línea de tres. Batum se echaba el equipo a la espalda por parte de Francia, mientras que Bogdanovic hacia lo propio para los serbios (66-72). Vincent Collet solicitaba su segundo tiempo muerto de la segunda mitad a falta de 3:13 para la conclusión del duelo. Stefan Markovic era expulsado tras cometer la quinta falta personal, baja sensible para Djordjevic. En los tres últimos minutos empezaba el duelo de artilleros. En un lado Teodosic y en otro Batum anotaban de tres (71-77). Dos triples seguidos de Francia apretaban el partido (79-82) a falta de un minuto. Dos tiros libres anotados por Kalinic cerraban el partido a falta de 16 segundos (82-86). Al final, triunfo de Serbia por 85-90.
De esta forma, Serbia peleará el oro frente a Estados Unidos el próximo domingo en el Palacio de los Deportes. Por su parte, Francia luchará por conseguir el bronce el sábado a las 18:00 contra Lituania.