El Caja Laboral quiere seguir cosechando éxitos en la Euroliga, pero los resultados no sólo dependen de ellos. Además, de ganar en casa ante el Montepaschi, condición indispensable, necesitaría que el ruso Khimki perdiera contra Olympiacos en Grecia para poder entrar en las opciones de los cuartos.
"Sería un gran premio si podemos ganar y si se dan los resultados a favor, pero yo estaría satisfecho con la victoria" , señalaba Zan Tabak.
Los vascos han demostrado en este Top 16 que las pistas difíciles se les dan bien, y es que han derrotado a Besiktas, Fenerbahçe y Maccabi a domicilio, pero se les plantea como asignatura pendiente ganar en el Buesa Arena (sólo han conseguido imponerse en 3 ocasiones). En este sentido, Fernando San Emeterio, el capitán baskonista, ha pedido al público que anime como si de una final se tratara: “no tengo duda de que la gente va a responder y nos va a animar, espero que sea una de esas noches de disfrute y juntos podamos pasar a cuartos”. Por su parte, el entrenador de los vascos, Zan Tabak, ha declarado que deberán jugar a muerte y al límite, sabedor de lo que una victoria significaría para su equipo en este momento tan delicado.
En Liga, los de Tabak no están en la mejor de las situaciones: aunque en la parte de arriba de la tabla (ahora marchan segundos, con el Barcelona Regal a 2 victorias), la última derrota en Málaga parece haber minado los ánimos baskonistas, y es que encajar 92 puntos en un partido en el que se perdía por 15 al descanso no es plato de buen gusto para nadie.
Toca hacer números para pasar a cuartos
A pesar de lo igualado en el grupo F, en el que se encuadra el Caja Laboral, para pasar a cuartos de final todas las opciones tiene un denominador común: imponerse al Montepaschi en casa. En caso de ganarle, y contando con que son los 4 primeros equipos de cada grupo los que se clasifican en la siguiente ronda, los vascos podrían pasar como terceros en caso de que Maccabi (segundo en el grupo) perdiera en Barcelona y que, además, Khimki ganara al Olympiacos por 11 puntos o más de diferencia. En este caso se daría un empate a cuatro que dejaría al Caja Laboral tercero.
Ahora bien, en caso de que el Barcelona Regal perdiera en casa y el Olympiacos ganara en casa o perdiera de 13 como mínimo, los vascos quedarían como cuartos, igualmente válido, puesto que seguirían vivos de cara a la siguiente fase.
Mismos errores, diferentes competiciones
En el partido de ida, los italianos consiguieron imponerse por 11 puntos pero la poca defensa ofrecida en el Martín Carpena en el último encuentro de liga fue la misma que se vio en Siena. Los 15 triples anotados en el tercer cuarto sentenciaron el partido, que en el minuto 33 dejaba un pobre 71 a 54 en el electrónico.
El resultado final fue de 85 a 74, unos números muy normales para los italianos, incluso por encima de los habituales. Los de Luca Banchi promedian unos 81 puntos por encuentro, con un acierto de un 49% en tiros de 2. Aunque sólo recuperan una media de 5 balones por partido, mientras que pierden unos 11, el entrenador del Caja Laboral no acaba de fiarse de un equipo que se juega tanto, y que viene de perder 4 partidos seguidos: “tienen muchísimo talento en el uno contra uno y en su línea exterior, es cuestión de tiempo que vuelva a ganar”, admitía Tabak.
Con toda esta mezcla, los aficionados azulgranas esperan la mejor versión de su equipo para permanecer en la lucha europea hacia el Top 8, hazaña difícil donde las haya. Eso sí, paso a paso, y el primero de todos ellos será el partido ante el Montepaschi, añadiéndole la espera de resultados favorables. Nadie dijo que fuera fácil…