El intercambio de canastas del inicio no hacía presagiar al explosión de juego que presentaría el CAI pocos minutos más tarde. Stefansson y Llompart tomaban las riendas de los maños, mientras que para el UCAM Murcia era el joven Franch el que se encargaba de plantar cara a los locales. Con el triple del mismo Franch, el resultado llegaba al empate a 9, pero la defensa caísta empezaba a aparecer, y los errores de los murcianos se sucedían ataque tras ataque.

Con acciones geniales, como un coast to coast de Van Rossom, un 1c1 de Setfansson que dejaba sentado a Antelo o los 3 mates consecutivos de Jones, el CAI se encargaba de poner tierra de por medio. Hasta van Rossom se animaba a machacar, lo que propiciaba que el entrenador murciano pidiera un tiempo muerto. Visiblemente enfadado, pedía muchísimo más orden en defensa, pero en vano. El CAI seguía anotando a placer, y aunque con una mejor elección del tiro, el UCAM no conseguía anotar ante el sólido muro que presentaba el conjunto de José Luis Abós.

El poder anotador maño explota

Rudez, el protagonista de este tramo del partido, culminaba el parcial de 14-0 que había conseguido su equipo, y seguía defendiendo con uñas y dientes. Los murcianos, que no anotaban desde el 11-12, rompían su sequía anotadora, y sumaban 2 puntos para acabar el cuarto con un 29-16 en contra. Berni Rodríguez, que al principio parecía liderar a su equipo, se mostraba totalmente desconectado y con pocos recursos. El CAI, por su parte, registraba una de sus mejores anotaciones en tan sólo 1 cuarto: 29 puntos.

En el segundo cuarto, Abós proponía a Golubovic ocupar la posición de poste bajo, y el nuevo integrante de los maños respondía con solvencia: tras 6 puntos seguidos, ponía el más 20 a favor de los rojillos. Además, se sumaba a la defensa de su equipo, y recuperaba un balón atrás. Llompart, que asistía por detrás al serbo-montenegrino, empezaba el festival anotador de su equipo en este segundo período. Aguilar, que se atrevía desde la línea de 6,75 y Rudez, que parecía dispuesto a fulminar al UCAM, acababan por hundir a los de Óscar Quintana.

El CAI Zaragoza anotaba ante un rival que necesitaba mucha ayuda para sumar, y que en defensa se mostraba desaparecido.

Jones, amo y señor en la pintura, seguía ampliando la renta en el electrónico. Abós aprovechaba para dar entrada a Adrián García, y es que la diferencia, a pocos minutos para el descanso, era de 30 (53-23).  Roll anotaba ante una inexistente defensa murciana, y Aguilar, que robaba en defensa, seguía provocando las faltas visitantes. La presión maña no cedía, y conseguía canastas muy valiosas contra un UCAM Murcia que parecía haber tirado la toalla. La primera mitad finalizaba con unos números más que claros: 33 puntos para el CAI en tan sólo 10 minutos, y 14 para el UCAM, que no encontraba la manera de romper esta barrera.

Abós da entrada a los secundarios para rematar la faena

El tercer cuarto empezaba con un 2+1 de Aguilar y una canasta fácil de Golubovic. El paso por los vestuarios no parecía surtir efecto en los hombres de Quintana, y aunque a través de buenos contraataques sumaban al marcador, la diferencia de 30 abajo dolía demasiado.

El CAI, con los deberes hechos, se permitía una defensa más floja para lo que acostumbran a ser sus actuaciones. Lewis, Barlow y un Berni Rodríguez que era aplaudido por el público ponían la directa, y con 11 puntos casi seguidos maquillaban el resultado. Abós pedía tiempo muerto y sus órdenes en defensa, que pasaban por cambiar de zona a individual, devolvían la solidez pedida. Aun así, eran Lewis y Antelo los que seguían luchando por sacar a flote la nave murciana.

El último cuarto, ya con el desenlace escrito, servía a ambos equipos para seguir trabajando los últimos flecos de la temporada. Abós, que ya había dado entrada a Javier Marín, pensaba en el partido como una puesta a puntos para los playoffs, y hacía jugar a su equipo para llegar a los 100 puntos, resultado inédito en el Príncipe Felipe. Aunque con acciones a destacar, fue el triple de de Pedro Llompart el que pondría de pie a la hinchada maña: con este tiro se pasaban los 100 puntos, y llegarían 3 canastas más que pondrían el resultado final: 108 a 74. Con esta victoria, el CAI se queda quinto en la lucha por la liga. Golubovic, que debutaba en Zaragoza, fue el mejor del encuentro, con 17 puntos, 7 rebotes y un 26 de valoración. De cerca le siguen Pablo Aguilar (13 puntos, 23) y Jon Stefansson (14 puntos, 18).

Aun sin el factor cancha a favor (necesitaba que el Valencia Basket perdiera contra La Bruixa d’Or para ser cuartos, y no fue así), es la mejor clasificación del equipo en su historia, y ahora empiezan los playoffs, la guinda perfecta a una temporada para enmarcar. El primer partido será el jueves 23 de mayo, en la Fonteta.