El CAI Zaragoza empezaba el partido con el 5 de gala, la pareja de georgianos que hizo furor en Bilbao y 3 acompañantes de lujo: Llompart, Roll y Tomàs. Aun así, y con toda la carne en el asador, no fue, ni de largo, la mejor versión del conjunto rojillo. Los fallos en las acciones de ataque se sucedían, y Saúl Blanco, que tomaba las riendas del CB Canarias, se afanaba en marcar diferencias desde el inicio.
Las canastas al contraataque dan vida a los canarios
La falta de concentración de los maños se hacía evidente en el mal balance entre ataque y defensa: de los primeros 8 puntos canarios, 4 llegaban desde el contraataque, y se convertía en hazaña más que difícil parar a Blanco. El resultado era de 4 a 12, y José Luis Abós pedía tiempo muerto para frenar la sangría de los aurinegros. Ni la afición se mostraba comprensiva con su equipo, y se lo hacía saber con tímidos silbidos.
La defensa del CAI empezaba a endurecerse, pero los rebotes ofensivos que capturaba el CB Canarias le daban muchas opciones para acabar anotando. A pesar de ello, no abría brecha en el marcador, gozaba de muchas oportunidades para alejarse y no lo hacía. Sekulic, que se estaba haciendo amo y señor de la pintura, ponía en evidencia a los jugadores interiores de José Luis Abós, que no veían cómo frenar su juego.
Damjan Rudez aparecería hacia el final del cuarto para firmar un jugadón con el que hacer despertar a su equipo y ponerse a 5 puntos por debajo en el marcador. Una última conexión del croata con Joseph Jones pondría el 12 a 14 con que finalizar el primer cuarto. Los mejores del encuentro, hasta el momento estaban siendo del CB Canarias: Blanco y Sekulic, con 6 puntos cada uno, lideraban a su equipo con mucha solvencia.
El CAI no aprovecha el momento de desconexión canaria
En el inicio del segundo período, le llegaba al CB Canarias su peor momento en el partido. Sin anotar desde el minuto 6 y demasiado relajado, parecía estar fuera del partido. Pero el CAI no parecía tener mejor alternativa, y es que estaba muy blando en ataque, y las posesiones se sucedían sin que ninguno de los 2 conjuntos reaccionara para castigar al rival.
Los maños se mostraban incómodos en la pista, en defensa no encontraban la manera de frenar el juego canario, que conseguía 3 triples en poco tiempo. En ataque, el único que se mostraba eficiente era Pedro Llompart, así que la diferencia de +10 llegaba al electrónico para los de Alejandro Martínez. Tras un tiempo muerto de Abós, sus pupilos conseguían recuperar más balones en defensa, pero la precipitación a la hora de atacar tiraba por tierra el trabajo hecho atrás.
Un parcial de 7-0 encabezado por Llompart y Roll y culminado por un genial Rudez devolvía la alegría al juego maño, que aún tenía lagunas en su defensa y permitía canastas muy fáciles al contraataque. Así, se llegaba al descanso con el 27 a 29 en el marcador.
El CAI debía empezar la segunda mitad con más consistencia en su defensa, y buscar más efectividad en su ataque para igualar el partido y plantar cara al CB Canarias. Aun sabiéndolo, dejaba que los aurinegros sumaran rápido, y el contraataque de los canarios, el mejor arma de la primera mitad, volvía a aparecer.
El CB Canarias planteaba una defensa muy cerrada, con la que poder recuperar balones y correr en transición
La defensa canaria era un muro infranqueable para el CAI, que no encontraba soluciones para superarla. Las ayudas para evitar canastas y la buena defensa en los 1c1 hacían que los maños sufrieran en exceso para anotar una canasta. Entre Úriz y Sekulic volvían a la diferencia de 10 puntos, y un Saúl Blanco enorme volvía a correr para anotar a placer.
El Príncipe Felipe era consciente del mal momento por el que pasaba su equipo, y al ritmo de “CAI” empujaba para llevarse la primera victoria de la temporada en casa. Un Shermadini inédito hasta el momento hacía acto de presencia en la pintura, y castigaba a los interiores canarios. Con todo, se llegaba al final del tercer cuarto con un 37 a 47 en el que una tímida reacción maña había sido neutralizada por un CB Canarias muy sólido atrás.
Rudez hace soñar al Príncipe Felipe con la victoria
El alero croata se echaba al CAI a la espalda, y sabedor de la necesidad de puntos de su equipo, sumaba un triple y un genial mate con el que se situaba a 7 puntos en el marcador. La defensa caísta se endurecía, Tabu hacía una gran labor con Bivià, y Shermadini se mostraba muy activo en ambos lados de la cancha. Pero no era suficiente para parar a un CB Canarias que lideró el encuentro desde el primer cuarto.
Al CAI le quedaba mucho trabajo por hacer, y el tiempo iba acortándose. A falta de 3:50, se ponía a 11 puntos y seguía confiando en su trabajo defensivo para ganarle la partida a los canarios. Y se encaminaba a ello, poniéndose a 7 puntos a falta de poco más de 2 minutos. Una falta innecesaria de Shermadini y otra pérdida de Tabu servían en bandeja el triunfo al conjunto isleño, que suma, así, su segunda victoria en Liga.
Blanco y Sekulic, brillantes desde el inicio, supieron liderar a su equipo ante un CAI Zaragoza demasiado perdido en algunos momentos del partido. El mejor de los maños fue Damjan Rudez, quién, con 19 puntos y 4 asistencias, firma un 21 de valoración.