El CAI Zaragoza llegaba a este encuentro conociendo ya el resultado de sus rivales directos. El Lietuvos Rytas había ganado al Cedevita Zagreb por la mínima, lo que obligaba a los maños a vencer al Besiktas por una ventaja mínima de 7 puntos para conseguir la clasificación. Tarea muy difícil, motivada por el mal arranque del Last32 de los ‘rojillos’.

Un factor clave le faltó hoy para guiar al CAI Zaragoza hacia la victoria: el Príncipe Felipe. El equipo era el mismo, pero el escenario era distinto. El calor de la marea roja que se desplazó hasta Huesca fue insuficiente para el triunfo, y por consecuencia para la clasificación.

Arranque titubeante

No encontró la sintonía el conjunto de José Luis Abós en el comienzo del partido. El acierto de Roll y Llompart era insuficiente para frenar las acometidas turcas en los primeros compases del choque. A mediados del primer periodo se encendieron las primeras alarmas, puesto que el Besiktas se iba escapando poco a poco en el marcador (5-13). No sirvieron de mucho las rotaciones, ni el empuje del veterano Sanikidze, ya que la diferencia se agravó hasta los 12 puntos al término de los primeros 10 minutos.

Conocidos ya los resultados de sus precedentes, y conscientes de la necesidad de vencer por una renta de al menos 7 puntos, los maños no estaban dispuestos a darse por vencidos a las primeras de cambio. Los ‘rojillos’ apretaron los dientes en defensa y subieron la intensidad en ataque. De este modo, propinaron rápidamente un parcial de 15-6, motivado especialmente por el acierto exterior de Tabu y Stefansson. La directa estaba puesta y era cuestión de tiempo que el CAI le diese la vuelta al resultado, algo que llegaría en el minuto 17 gracias de nuevo a un triple del base belga (30-29). La afición se vino arriba y el ambiente cada vez estaba más caldeado. Al descanso se pudo llegar con la ansiada diferencia, si no hubiera sido por un triple de Lofton en los últimos instantes (41-36).

"Lofton fue el héroe del partido"

Tras la salida de vestuarios, el CAI Zaragoza volvió al ritmo del primer cuarto, y en un abrir y cerrar de ojos los turcos ya le habían dado la vuelta al marcador (43-44). Sanikidze se puso el mono de trabajo para despertar el ánimo de la afición maña y volver a ilusionar a su equipo con la remontada. Fueron minutos de intercambios de canastas entre él y Lofton, quien acabó siendo indiscutiblemente el héroe y mejor jugador del encuentro.

Lofton anota sobre la bocina

En los últimos 10 minutos se entró con todo por decidir. Un cara o cruz que daría el pase a la siguiente fase de la Eurocup al CAI o pondría el punto y final a su participación esta temporada. El ala-pivot georgiano volvió a coger el timón maño y a base de triples lograba pequeñas diferencias a su favor. No obstante, el acierto exterior turco no permitía a los ‘rojillos’ escaparse en el luminoso. Con menos de un minuto, los de José Luis Abós optaron por el empate y tratar de ampliar la ventaja en la prórroga. Sin embargo, Lofton de nuevo consiguió un palmeo a falta de 6 segundos que hundió definitivamente el orgullo del CAI (77-79). De esta triste, pero digna forma el conjunto de la capital aragonesa pone fin a su andadura continental.