Sin excusas. La pretérita leyenda de David contra Goliat, donde creer en el triunfo del pequeño se presentaba como algo más que quimera, regresaba en el tiempo y se plantaba en el primer encuentro de la Euroliga para el Barça Lassa, que recibía la visita de la cenicienta del grupo. Con el triunfo como un hecho más que obligado, el conjunto de Xavi Pascual venció con cierta dosis de sufrimiento al Zielona Gora tras otro encuentro que dejó patentes las lagunas de un equipo en construcción y que necesita a marchas forzadas consolidar su fiabilidad (78-72). 

Los visitantes, bajo la batuta del ex Asseco Prokom, Lukasz Koszarek y con un inconmensurable Vlad Moldoveanu, mostraron un juego desenfadado que solo se vino abajo cuando el poderío físico azulgrana castigo el débil juego interior polaco. El alero rumano de 22 años Vlad Moldoveanu, con 14 puntos, se postuló como uno de los jugadores a tener en cuenta del Zielona y que con toda seguridad pondrá su nombre en el escaparate europeo de cara a la próxima temporada. 

Pragmatismo azulgrana con dosis de realidad

Como un lobo con piel de cordero, sin pudor alguno y con un atrevimiento inusual en un conjunto que se estrenaba en el Palau, el Zielona empezó el encuentro dominando a los azulgrana, infundiéndoles un parcial de 2-10 basado en un ritmo alto de juego, con el joven Vlad Moldoveanu como gran estandarte, y un buen porcentaje en el tiro de tres. Con el susto en el cuerpo, a medida que transcurrían los minutos el Barça fue recuperando la compostura y con un buen Satoransky como director de orquesta conseguían cerrar el primer cuarto solo uno abajo (19-20).

Los siguientes diez minutos siguieron la línea con el que concluyó el primer cuarto. El Barça Lassa aportó la dosis de realidad necesaria, en un duelo extraño, para equilibrar las fuerzas y hacerse así con el control del encuentro. El parcial de 24-17, en parte gracias a un inspiradísimo Samardo Samuels con 23 puntos, daba la ventaja al conjunto azulgrana antes del descanso, con la sensación de que los hombres de Pascual estaban sufriendo en exceso frente un conjunto con mucha voluntad pero poca suntuosidad (43-37).  

Amedrentados ante la serenidad polaca

Ni el descanso ni la bronca de Xavi Pascual sirvieron para despertar un Barça Lassa aturdido por la situación y que vivía un autentico mal sueño. Por el contrario, el Zielona volvió a plantarse sobre la pista blaugrana con ganas de llevar el partido hasta el final y, con el incondicional apoyo de los 500 aficionados polacos desplazados a la Ciudad Condal, hacían de cada acción un pequeño espectáculo que les ayudaba a creer en la proeza. 

Un triple de Navarro cuando la bocina marcaba el final del tercer cuarto sirvió para que el parcial no se lo llevará el conjunto polaco, que había visto recompensado sus constantes acciones de bloqueo y continuación (64-57). Samuels y una pizca de capitán azulgrana calmaban el run run de la afición azulgrana que no veía claro el devenir del partido.

Los últimos diez minutos mostraron la imagen más pobre del Barça Lassa en mucho tiempo. Lejos de la rendención del Zielona, los polacos creyeron más que nunca en la victoria y consiguieron ponerse tres arriba a 2:06 para el final. Samardo Samuel, Shane Lawal y un triple final de Satoransky sacaron del apuro al Barça, que de esta forma conseguía batir al Zielona en el primer triunfo europeo de la temporada (76-72).

Los de Xavi Pascual cumplieron con el guión previsto pero deberán exhibir algo más que músculo si quiere competir con garantías. Por su parte, compitiendo por encima de sus posibilidades, el conjunto que dirige esloveno Saso Filipovski cerró una sensacional actuación en su primera visita al Palau.

Panathinaikos, primera prueba de fuego

Con un balance de una victoria y una derrota, los hombres de Xavi Pascual tendrán que hacer frente a la primera prueba de vigor con la visita del Panathinaikos de Sasha Djordjevic, que llegará a Barcelona con el mismo balance tras caer en Rusia, el próximo jueves a las 21:00.

Por su parte, el Zielona Gora buscará estrenarse en casa ante el atractivo Lokomotiv Kuban de hombres como Víctor Claver, Singleton o Bykov en el encuentro que se disputará en Polonia.