La Liga entra en su recta final y los blancos buscaban una nueva victoria en el fortín del Palacio, sólo quebrantado en toda la temporada por el Valencia Basket. En frente un CAI Zaragoza que lleve meses metido en los playoff y está haciendo una campaña seria y equilibrada. Inicio lento de partido con posesiones bastante largas y malos porcentajes de tiro. La igualdad era la tónica general con los dos conjuntos ajustándose en las marcas. Buenos minutos del georgiano Sanikidze, haciendo mucho daño en una zona merengue un tanto dormida.
Ecuador del parcial y carrusel de cambios en ambos conjuntos. El Madrid comenzaba a dominar el duelo gracias a la regeneración de su pintura, con Reyes y Mejri haciendo de torres gemelas. Pero la anotación blanca no estaba para muchas alegrías, con malas selecciones de tiro y poca intensidad en los rebotes. De hecho, los merengues fueron los primeros en llegar al bonus de personales, lo que aprovecharon los maños para volver a comandar el partido. Final de un errático y estático primer cuarto con 14-17.
Electrocución de Bourousis
Las buenas sensaciones zaragocistas se confirmaron en el comienzo del segundo parcial, cuando Rudez y Jonathan Tabu enchufaron puntos sin piedad y los suyos se fueron +8 en el marcador. Inmediato tiempo muerto de Laso que abroncó a sus pupilos por la falta de intensidad y concentración. Como casi siempre el mensaje caló y Sergio Rodríguez entró en modo francotirador concatenando dos triples y un robo de mérito. Dani Díez se sumaba a la fiesta desde el perímetro, pero respondían los maños con un misil de Stefansson.
Buenos minutos de baloncesto con ambos conjuntos friéndose a canastas en plan duelo en OK Corrall, pero el CAI aún por encima. Las tornas fueron dándose la vuelta gracias a un Madrid mucho más desatado en las contras, lo que le permitió correr la pista de manera mortal. A pista entraba Jaycee Carroll, que prácticamente ha recuperado el tono físico al 100 %, lo que es sinónimo de misiles desde la larga distancia. El Chacho sacaba su batuta de maestro genial y la remontada se materializaba del todo. Pero los de Abós son un equipo muy bien trabajado tácticamente y aprovecharon los errores merengues, entre ellos un enajenado Bourousis, que cometió cuatro personales casi consecutivas con técnica incluida y se borró del partido. Al descanso con 39-40 y todo parejo.
Férreo CAI
Tras la reanudación Rudy Fernández volvió a pista. El escolta balear se había cargado rápido con dos personales y Laso lo estaba guardando cual tesoro, más tras la absurda auto eliminación de Bourousis. Los dos equipos seguían atacándose desde el perímetro y se pudieron ver canastas preciosistas por ambos bandos. Los maños no se amedrentaban y anotaban con enorme soltura, ahora comandados por Joseph Jones. Seguían transcurriendo los minutos y los blancos no encontraban manera de meterle mano a los maños.
Rudy comenzó a jugar de falso playmaker, surtiendo de balones a los hombres altos. Ahora eran Slaughter y Mirotic los encargados de producir en la pintura. Ello, sumado a la gran actuación defensiva de Darden, permitió robar balones. Los últimos minutos del parcial fueron favorables al Madrid, no sólo porque se puso por encima en el electrónico, sino porque el gran tapón de Mirotic y los puntos fáciles de Rudy comenzaban a decantar la balanza de la calidad individual. Pese a ello 67-60 y todo abierto aún.
Rodillo blanco
Según transcurrían los minutos del último parcial los maños se veían cada vez más faltos de recursos: físicamente muy cansados por el enorme esfuerzo y con las muñecas menos calientes. Jonathan Tabu conectaba algún triple esporádico, pero la intensidad de la defensa aragonesa había bajado muchos enteros, y el Chacho se lucraba con quirúrgicas asistencias. Protagonista absoluto de los puntos blancos estaba siendo un desatado Rudy Fernández, que enchufaba desde todas las posiciones y llegó a la treintena con soltura.
Después de luchar durante tres cuartos, finalmente el Madrid tuvo un final plácido de partido, venciendo a un combativo pero agotado CAI Zaragoza por 92-79. Importante victoria de los merengues para apuntalar el liderato de la Liga, el cual se vio algo amenazado tras la derrota contra el Valencia, pero los pupilos de Laso han ratificado que el primer puesto es de su patrimonio personal. 29-1 en Liga, precisamente el día que el presidente de la ACB le entregaba a Florentino Pérez una placa conmemorativa por el mayor número de victorias consecutivas en la historia de la competición.
Protagonistas
El MVP del partido fue un espectacular y asesino Rudy Fernández (30 puntos, 7 rebotes, 5 asistencias, 5 faltas recibidas, 40 de valoración). El escolta balear se despachó a gusto con una actuación simplemente perfecta, aportando en todas las facetas del juego, masacrando a los rivales y haciéndolo con unos porcentajes de tiro encomiables (8/11 en tiros de dos, 3/5 en triples, 5/5 en libres). Además firmó esta exhibición sin perder ni un sólo balón.
El resto del equipo tuvo una anotación muy repartida, pero destacar por su calidad y ritmo a los dos Sergios. Tanto Llull (13 puntos, 3 rebotes, 4 asistencias) como el Chacho (9 puntos, 7 asistencias, 14 de valoración). Terminar con el trabajo interior incansable de Salah Mejri (8 puntos, 6 rebotes) y Felipe Reyes (8 puntos, 3 rebotes, 3 asistencias), dos gladiadores de lujo en la pintura.
Por el aguerrido CAI subrayar la actuación de los cinco hombres que alcanzaron los dobles dígitos en anotación. Jonathan Tabu (14 puntos, 4 asistencias), Joseph Jones (14 puntos), Victor Sanikidze (11 puntos, 4 rebotes, 3 asistencias), Pere Tomás (13 puntos, 4 rebotes) y Stefansson (11 puntos, 3/4 en triples) lo dieron todo por el equipo, pero se vieron faltos de gasolina.