Tras recorrerse la friolera de 12.000 kilómetros de Kazan a las Islas Canarias, los merengues visitaban a un peligroso Iberostar que siempre vende muy cara la derrota en su cancha. El duelo amaneció con apariencia de igualdad, canastas en ambas pinturas de los hombres interiores y alternancia en el electrónico. De hecho, la dupla formada por Sekulic y Sigma es una de las mayores armas de los amarillos. Sin embargo, el duelo comenzó a desequilibrarse gracias al festival de triples del Madrid, que arrancó con un imperial 4/4 desde el perímetro. Especialmente clarividente un Nocioni con la muñeca ardiendo.

Debido a ello, los madridistas rozaron la barrera de los diez puntos y Alejandro Martínez tuvo que pedir un inmediato tiempo muerto. Sus nociones reactivaron a los suyos, que concatenaron canastas de mérito levantando a su ruidoso público, como el mate estratosférico de Luke Sikma. El center norteamericano no sólo aportaba puntos, sino que intimidaba en la zona con un recital de pinchos de merluza dignos del mejor chef. Los isleños frenaron la sangría y se volvían a meter en el partido con el triple de Úriz (parcial de 12-3). Con la entrada a canasta de Carroll, terminaba el interesante primer parcial (21-25).

El Madrid disfruta del baloncesto rápido

Muy intenso el ritmo del partido, que se disputaba frenético de un lado al otro de la cancha, con transiciones eléctricas y bastante acierto en los tiros de campo teniendo en cuenta la velocidad del mismo. El banquillo blanco comenzó a funcionar y la pareja Chacho-Mejri volvió a saltarle las tuercas y tornillos a los canarios. El base de La Laguna se siente como pez en el agua liberado de las marcas, y pasó de manera quirúrgica para que la torre tunecina se colgara con violencia en reiteradas ocasiones. Ahora, era el Madrid el que enlazaba un parcial favorable de 4-11 y se alejaba de nuevo.

Los dos equipos se seguían friendo desde el 6.75 y el cañonazo de Maciulis era respondido por otro de San Miguel. Felipe Reyes dio el susto tras sufrir un golpe en la rodilla izquierda y tuvo que visitar el banquillo dolorido. Fueron minutos para Campazzo (que no jugó nada en Kazan) y Carroll, dos hombres de refresco que deben ayudar a cambiar el ritmo de los partidos. Salah Mejri seguía haciendo mucho daño en la pintura canaria, aprovechando su enorme envergadura, pero Iberostar no perdía la cara al duelo y era Beirán el que aportaba puntos, leyendo a la perfección las jugadas de pick&roll. Otro triple de Maciulis cerró la primera mitad (39-52). Gran baloncesto y jugosa ventaja de los blancos.

Plácida victoria blanca

Tras la reanudación, entraba en pista Sergio Llull, hasta entonces descansando en el banquillo. Sikma y Sekulic seguían a lo suyo, anotando con soltura y dando aún esperanzas a los isleños. Sin embargo, los amarillos abusaban en exceso de los tiros exteriores y no acudían prestos al rebote para forzar segundas oportunidades. El duelo se calentaba aún más tras un plástico 2+1 con canasta a aro pasado incluída de Rudy. El Tenerife intentó reducir la distancia recrudeciendo la defensa, pero se cargaba de personales y llegaba rápido al bonus. Rivers estaba conectando a la perfección con Bourousis, que aprovechaba su enorme físico para forzar faltas de tiro. Nocioni, inmaculado desde el triple con 4/4, se apuntaba a la fiesta y el Madrid alcanzaba la máxima del partido. Final del tercer cuarto con un contundente 58-74.

Con el partido muy de cara, el Madrid se pudo permitir más rotaciones para dar descanso a algunas de sus figuras. Laso puso en pista a la dupla Chacho y Llull, buscando un mayor control del juego y liberar al balear en los tiros. Los canarios siguieron luchando con pundonor, pero el triple de K.C. Rivers terminó de rematarlos. Los 12 jugadores de la plantilla merengue habían anotado puntos, demostrando su potencial y polivalencia. Ya con todo sentenciado, se vieron canastas más cómodas y algo de maquillaje en el resultado. Cuando el Madrid está cómodo en la pista es un auténtico martillo pilón. Cómoda victoria de los merengues 82-93, que alcanzan el 4-0 en Liga Endesa.

Protagonistas

Anotación muy repartida por el Madrid. Todos sus jugadores estrenaron el casillero anotador y hasta cuatro llegaron a los dobles dígitos. Gran trabajo en la zona de Salah Mejri (13 puntos, 5 rebotes, 2 robos, 6/6 en tiros de dos, 16 de valoración). La torre tunecina aprovechó a la perfección sus kilométricos brazos e intimidación para darse un festín. Lo completaron K.C. Rivers (11 puntos, 5 rebotes, 5 asistencias, 3/4 en triples), Rudy Fernández (13 puntos, 5 rebotes) y Andrés Nocioni (11 puntos, 3/3 en triples), un tridente de lujo que masacraron al rival desde el perímetro.

Por el luchador Iberostar Tenerife subrayar sobremanera al mejor jugador del partido Blagota Sekulic (21 puntos, 11 rebotes, 6/7 en tiros de dos, 27 de valoración). El montenegrino demostró su enorme calidad en la pintura, y su buena muñeca a media distancia. Le siguió su compañero interior Luke Sikma (12 puntos, 8 rebotes, 4 asistencias) un auténtico tanque que se parte la cara en todos los duelos. Cierran los destacados Nicolás Richotti (12 puntos, 4 asistencias) y Saúl Blanco (12 puntos, 3 rebotes).

Fotos del texto: ACB.com