Pese a sus 34 años Felipe Reyes está mejor que nunca. El capitán merengue firmó una actuación brillante (22 puntos, 10 rebotes, 7/12 en tiros de dos, 5/8 en libres, 8 faltas recibidas, 29 de valoración) en el ajustado triunfo a domicilio del Madrid frente al Fuenlabrada (94-96). Además de llegar al doble-doble en anotación y rebotes, Espartaco contribuyó en casi todas las facetas del juego, aportando 1 asistencia, 1 robo y un tapón en los apenas 28 minutos que estuvo en pista.

Especialmente llamativa fue su aportación bajo los aros, llevándose todos los balones que quedaban sueltos. No en vano, de sus 10 rebotes la mitad fueron ofensivos, los cual suele significar falta personal contraria cuando no un 2+1. Su actuación coral terminó con 1/2 en triples, demostrando que Reyes ha mejorado exponencialmente su muñeca desde el perímetro y no es buena idea dejarlo solo en el arco del 6.75.

Eulis Báez hizo de todo

El madridista compartió galardón con el ala-pívot del Gran Canaria Eulis Báez (16 puntos, 8 rebotes, 6 asistencias, 6 faltas recibidas, 29 de valoración). El dominicano fue factor clave en la contundente victoria de los canarios sobre el Laboral Kutxa (93-77). Estuvo en pista casi 32 minutos, demostrando que es un baluarte físico y acabó con una envidiable estadística de 7/8 en tiros libres, un arma realmente importante para los hombres altos.

Además Báez fue también el máximo asistente de su equipo (incluso por encima del base titular Albert Oliver), demostrando que lo suyo no es sólo pundonor, sino también un buen trabajo en equipo. Su brillante participación la cerró con una recuperación y un espectacular tapón sobre el baskonista Kim Tillie, al que se le nubló el cielo.

En propias palabras del dominicano: "Estoy contento porque me salieron las cosas bien. Encima ganamos, eso siempre ayuda a que te salga una sonrisita más, pero a mí lo que me importa es que consigamos la victoria".