Última jornada de la primera vuelta del Top 16, y el Madrid que visitaba la siempre difícil cancha del Zalgiris. Patrios y lituanos ya se habían enfrentado en el primer grupo con sendas victorias del Madrid, pero sudando sangre para vencer en tierras bálticas. En los prolegómenos del duelo tuvo lugar un emotivo homenaje a la leyenda Sarunas Jasikevicius, que ahora forma parte del staff técnico. El partido en sí comenzó con intercambio exterior de canastas, demostrando ambos conjuntos que tienen cañoneros de calidad. No tardó mucho en dominar la zona un iluminado Felipe Reyes, por lo que los merengues tomaron la primera ventaja.
El Zalgiris volvía a la pomada gracias a los misiles de Milaknis desde el 6.75. Las transiciones eran rápidas, por momentos deslavazadas, pero los dos equipos se estaban moviendo más por impulsos que por tácticas. Mucho uno contra uno y defensas de manos largas, por lo que se llegaba al bonus de personales de forma prematura. Reyes seguía percutiendo el aro del Zalgiris con calidad, pero veteranos como Songaila salían desde el banquillo para responder. Final del alocado primer cuarto con un ajustado 23-24.
Igualada contienda
Amaneciendo el segundo parcial los dos técnicos comenzaron un carrusel de rotaciones. Por los blancos entraba en pista Sergio Rodríguez para imprimir una velocidad extra en el manejo de balón. Pero los lituanos cuentan aún con una vieja guardia que va perdiendo minutos, pero sale de refresco para responder, un ejemplo el eterno Javtokas. Nadie dominaba el ritmo del encuentro y los dos conjuntos iban a tirones. Tras el triple desde la esquina de Will Cherry los bálticos tomaban ventaja, y un enojado Laso pedía inmediato tiempo muerto. Los blancos estaban cometiendo demasiadas pérdidas de balón.
Encarnizada la batalla entre los dos equipos durante los siguientes minutos. Ninguno conseguía cerrar el grifo anotador del rival y los puntos seguían subiendo al electrónico en un partido eléctrico donde los ataques y desajustes se imponían a las defensas. Importante la intervención de Maciulis (que se enfrentaba al equipo donde creció como jugador), sus puntos mantuvieron al Madrid durante un periodo de deriva. Pero ahora eran los de Kaunas los que dominaban el resultado. El Madrid se mostraba indolente en las marcas, perdiendo infinidad de balones y ciegos cara al aro. De la momentánea zozobra vino a rescatar a los madridistas una vez más Reyes. El capitán puso pundonor, los blancos robaron un par de balones que culminaron Rudy y Slaughter. Gracias a ello se marcharon al descanso con 47-47. Partido totalmente igualado.
Y Rudy cogió su fusil
Tras la reanudación el Madrid impuso un parcial de 0-5 con triple de Rivers incluido, lo que obligó al tiempo muerto de Krapikas. Los lituanos respondían desde el perímetro, pero no cerraban bien la pintura, lo que aprovechaba Ayón para demostrar sus buenos movimientos en la zona. La paridad se mantenía en el electrónico, aunque eran los merengues los que imponían una ligera ventaja gracias a la aparición anotadora de Rudy Fernández, que se marchaba de sus marchas y concatenaba tres triples casi consecutivos.
Gracias a la erupción del escolta balear en el partido, el Madrid rompía la barrera psicológica de los diez puntos por vez primera. Muy intenso Rudy, que también recrudeció la defensa y robó balones fomentando contras mortales. Su desparpajo y motivación pareció espolear al resto del equipo, que defendió con mayor dureza. Aún así el Zalgiris no se marchaba del encuentro, los tiros libres le ayudaron a permanecer. Con el triple lateral de Nocioni el tercer cuarto culminaba 60-72. Aún no había sentencia, pero la ventaja era jugosa.
Victoria blanca y protagonistas
Siempre por encima de los diez puntos se mantuvieron las diferencias en el último parcial. Los de Laso supieron gestionar a la perfección la ventaja cosechada gracias al brillo de sus estrellas, y no dieron opción a los bálticos. Importante y contundente victoria (71-88) en una cancha siempre complicada que permite a los merengues cerrar la primera vuelta del Top 16 en el competitivo Grupo E con 6-1, siendo líderes del mismo puesto que tienen un mejor basketaverage que el Maccabi (único equipo que les ha derrotado).
Destacar sobremanera a dos hombres. Los dos emblemas del equipo por experiencia, galones y pundonor. Tanto Rudy Fernández (17 puntos, 3 asistencias, 2 robos, 3/4 en triples, 24 de valoración), como Felipe Reyes (16 puntos, 6/11 en tiros de dos, 4 faltas recibidas), tiraron del carro cuando las cosas no estaban claras. Les acompañó en la segunda mitad otro veterano de enorme calidad como Andrés Nocioni (15 puntos, 6 rebotes, 16 de valoración), que en apenas 16 minutos firmó la sentencia de muerte de los lituanos.
Por un Zalgiris Kaunas muy peleón durante la primera mitad, pero que se vio falto de recursos y capacidad en la segunda parte, destacar la actuación de Arturas Javtokas (12 puntos, 6 rebotes), nunca brillante pero siempre luchador y competitivo. A este le secundaron Milaknis (11 puntos) y Will Cherry (9 puntos, 5 rebotes, 2 asistencias), activos al comienzo, pero desaparecidos en combate a la hora de la verdad.
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