Tras una arranque de temporada establecido como el peor de la historia en Los Angeles Lakers, anoche visitaban el Philips Arena de Atlanta para medirse a los Atlanta Hawks en un encuentro que daría mucho que hablar, debido a que Kobe Bryant podía superar los 32.000 puntos y quedarse más cerca de Michael Jordan.
Para este partido, después de muchas malas noticias Byron Scott recibía con ilusión el hecho de que Nick Young pudiera volver a las canchas tras lesionarse la pasada temporada, el técnico de la franquicia angelina alineaba de inicio a Jeremy Lin, Kobe Bryant, Carlos Boozer, Jordan Hill y Wesley Johnson, contando con las bajas de Ryan Kelly, Wayne Ellington, Julius Randle y Steve Nash, mientras que por su parte, los Atlanta Hawks partían de inicio con Jeff Teague, Kyle Korver, Thabo Sefolosha, Paul Millsap y Al Horford, contando como baja con DeMarre Carroll.
Desastrosos números, comienzo esperanzador
Los Lakers llegaban al partido recibiendo 117.8 puntos por 100 posesiones rivales... A ritmo de la peor eficiencia defensiva de la historia. Además de eso, el cinco titular de los Lakers tiene un diferencial de -89 puntos cuando está en cancha, ningún otro quinteto NBA está por debajo de -50.
De manera sorprendente tras ver lo ocurrido en los últimos partidos, los Lakers comenzaban con intensidad en la defensa y realizando buenas transiciones defensa-ataque acompañado de puntos por parte de Kobe Bryant, lo cual hacía que los Lakers estuvieran arriba por 8-10, aunque Byron Scott, veía que a Carlos Boozer Paul Millsap y Al Horford le estaban haciendo un descosido decidía sentarle para reforzar esta posición.
Tras seis minutos de juego aparecía en cancha Nick Young, una de las estrellas de los Lakers dentro y fuera de las canchas reaparecía tras haberse lesionado la pasada temporada, y lo hacía de una manera buena ya que con él en pista los angelinos conseguían encontrar una rancha de 0-12, por la cual terminaban el primer cuarto mandando en el marcador por 20-31.
Atlanta despierta a costa de Carlos Boozer pero no es suficiente
Sabiendo leer muy bien el partido, el segundo cuarto comenzaba con los Hawks atacando uno de los palos más débiles de los angelinos, a Carlos Boozer, al cual entre Paul Millsap y Al Horford le tenían desquiciado. A pesar de eso, el pívot iba compensando los 19 puntos que habían anotado diferentes jugadores de los Hawks al ser defendidos por Boozer, ya que en ataque sumaba un total de ocho puntos.
Para mantener la ventaja con la que terminaban el primer cuarto aparecía el jugador más seguido de la noche, Kobe Bryant sumaba un total de 16 puntos teniendo un buen porcentaje de siete tiros intentados, y anotados cinco. Al final, los Lakers se marchaban a vestuarios con la sorprendente ventaja de 52-67, ante unos Hawks que ni estaban ni se les esperaba en esos momentos.
Los Lakers vuelven a las andadas
Nada más comenzar la segunda mitad, los angelinos parecían recuperar fantasmas del pasado ya que veían como de inicio los Atlanta Hawks endosaban un trece a cero de parcial por el cual se ponían a tan solo tres puntos en el marcador. A pesar de eso, pronto las cosas se volvían a poner en su sitio con malas acciones defensivas por parte de Pero Antic.
Los Lakers no querían que se les escapara un partido que tenían controlado a la perfección, por lo cual Jeremy Lin despertaba y sumaba ya un total de quince puntos y diez asistencias, sumando así su primer doble-doble de la temporada, por el cual los angelinos terminaban el tercer cuarto con una efímera ventaja de 83-91, teniendo en cuenta que Kobe Bryant no había anotado ni un solo punto en este tercer cuarto.
Sufrida victoria
Como era de costumbre en los viejos tiempos, Nick Young lanzaba desde donde primero se encontrara, y eso a los Lakers le daba buen fruto a pesar de que Kyle Korver constestara con su primer triple del partido. A siete minutos del final, y ganando tan solo por tres puntos los Lakers, Byron Scott decidía que era el momento ideal para dar entrada a Kobe Bryant, el cual no anotaba desde el segundo cuarto.
Kobe Bryant llegaba con ganas, y en su primera acción ya anotaba sumando 21 puntos, pero eso no quería decir que los Lakers no pasaran problemas, ya que del otro lado de la cancha Jeff Teague a tres minutos del final ponía a los Hawks tres puntos abajo, obligando a pedir tiempo muerto a Byron Scott.
Con menos de un minuto por disputarse, el macho alfa de Los Angeles Lakers aparecía para poner las cosas en su sitio, Kobe Bryant alcanzaba los 32.000 puntos y daba una espectacular asistencia a Nick Young, que a pesar de lo hecho por Bryant fallaba dos tiros libres que permitían estar a cinco puntos a los Hawks. A pesar de eso, al final la victoria caía del lado angelino por 109-114, quedando Kobe Bryant como el mejor de la noche con 28 puntos y 4 rebotes.