Después de ganar los dos últimos partidos ante Orlando Magic y Charlotte Hornets, Miami Heat acudían a su casa, el American Airlines Arena, para recibir esta misma madrugada a Golden State Warriors, llegando estos con un gran balance de diez triunfos y tan solo dos derrotas, no sabiendo lo que era perder más allá de los últimos cinco partidos.

Para este partido, Erik Spoelstra tenía dos importantes bajas como eran la de Dwayne Wade y Chris Andersen, el base proseguía siendo baja tras perderse los últimos partidos, por lo cual Spoelstra alineaba un quinteto formado por Norris Cole, Mario Chalmers, Luol Deng, Shawne Williams y Chris Bosh, mientras que por su parte Steve Kerr contaba con la baja de David Lee, por lo cual alineaba un quinteto formado por Harrison Barnes, Andrew Bogut, Stephen Curry, Klay Thompson y Draymond Green.

Dominando para arrancar

En los primeros compases del partido, Golden State Warriors salía de manera decidida teniendo un parcial inicial de 5-11, obligando a Erik Spoelstra a pedir tiempo muerto. Tras él,  Miami Heat imprimían intensidad en defensa colocándose a cuatro puntos, aunque Stephen Curry desde la línea de tres puntos volvía a poner en ventaja los suyos, a pesar de ser contestado por Chris Bosh con un triple desde nuevo metros poniendo el 17-19 en el luminoso.

El partido entraba en una dinámica de canastas continuas en las que Miami Heat sacaban provecho gracias a un dos más uno de Luol Deng que les ponía arriba por un punto. Las malas acciones tanto en ataque como en defensa, propiciaban que Miami Heat se fuera hasta por siete puntos de diferencia, llegando al final del primer cuarto con un marcador de 36-30, siendo Mario Chalmers el mejor con trece puntos.

Mínima ventaja al descanso

Después de ver cómo en los minutos finales del primer cuarto el encuentro se abría, el segundo parcial llevaba el mismo camino ya que la cancha se había convertido en un correcalles. A cada tiempo muerto con el que el partido se encontraba, los Heat volvían de una excelsa manera aniquilando desde el perimetro a Golden State Warriors, que veía como a seis minutos para el descanso, los loscales ganaban de manera cómoda por 54-38, teniendo 16 puntos de ventaja.

Con sendos triples de Klay Thompson y Stephen Curry, Golden State Warriors se colocaba a diez puntos obligando a Erik Spoelstra a pedir tiempo muerto para que la sangría anotadora no fuera a mayores. Las consignas dadas por el técnico de los Heat daban sus frutos a medias ya que los locales se imponían por ocho puntos de ventaja. Al final, el partido se iría al descanso con la momentánea victoria de Miami Heat por 62-61 después de que Golden State Warriors recortara la desventaja con la que contaba. El mejor del partido tras 24 minutos era Chris Bosh con 17 puntos y cinco rebotes, mientras que en los Warriors Stephen Curry contaba con 18 puntos y tres rebotes.

Remontada visitante

Draymond Green tenía la potestad de conseguir la primera canasta de la segunda mitad, y por la cual Golden State Warriors daban la vuelta al marcador hasta que desde la esquina aparecía Luol Deng para anotar de tres puntos tras una gran combinación de equipo. A falta de siete minutos y medio para el final del tercer cuarto, Erik Spoelstra pedía el primer tiempo muerto de la segunda mitad ya que Golden State Warriors mandaban por 69-72.

La igualdad sería algo que se iría manteniendo poco a poco en el encuentro ya que ninguno de los dos equipos quería tirar por la borda todo el trabajo realizado. En los compases finales de este tercer cuarto, Miami Heat no estaban acertados y permitían que Golden State Warriors aventajara por 86-91 al final del tercer cuarto, siendo Stephen Curry el mejor con 30 puntos, cuatro rebotes y seis asistencias.

Curry es imparable

Teniendo una desventaja de cinco puntos, Miami Heat se presentaban en los últimos doce minutos de partido con ganas de hacer saltar la sorpresa en forma de victoria. En los primeros compases, Miami Heat iban recortando progresivamente su desventaja hasta encontrarse con empate a 95 puntos a falta de seis minutos y medio para el final del partido.

Golden State Warriors conseguían encauzar buenas jugadas que les llevaban a ponerse con nueve puntos de ventaja a tres minutos y medio del final, momento en el que Erik Spoelstra tenía que pedir tiempo muerto. Mario Chalmers había intentado recortar distancias con un lejano triple, pero lo único que conseguía era realizar un airball, mientras que Klay Thompson sentenciaba el partido con un triple desde nueve metros.

Al final, la victoria terminaría cayendo en manos de Golden State Warriors por 97-114, gracias a un brillante Stephen Curry que terminaba con 40 puntos, seis rebotes y siete asistencias, permitiéndose incluido el lujo de sacar un dos más uno a su defensor en una de las últimas jugadas del partido. Con este triunfo, los Warriors suman once victorias y dos derrotas, mientras que los Heat tienen ocho victorias y siete derrotas.

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Sobre el autor
Diego Blanco Taladriz
Gijón. Moderador de contenidos de VAVEL. Coordinador en las secciones de Tenis y Ciclismo. Puedes leer mis opiniones en @DiegoBlanco93 | E-mail de contacto: [email protected]