Uno de los equipos revelación del comienzo de la NBA es Milwaukee Buks, teniendo una gran combinación de juventud y experiencia que les hacía ser candidatos a luchar por estar entre los ocho mejores equipos de la Conferencia Este.
A pesar de esto, en las últimas horas se les ha añadido una seria complicación a los Bucks. En el partido disputado en el US Airways Center ante los Suns, un choque entre PJ Tucker y Jabari Parker dejaría lesionado al número dos del pasado Draft. En un primer momento no parecía nada grave su lesión y sólo se quedaría en un esguince de rodilla, pero las últimas pruebas han dado los peores resultados posibles a la franquicia de Wisconsin. Jabari Parker tiene rotura de ligamentos en la rodilla izquierda y se perderá el resto de la temporada.
Parker era uno de los claros favoritos a ganar el Rookie of the Year junto a Wiggins. Actualmente tenía las mejores estadísticas de los rookies promediando 12.3 puntos y 5.5 rebotes por encuentro. Complicada papeleta tiene ahora Jason Kidd que tendrá que ingeniárselas para seguir manteniendo un gran nivel.
Maldición rookie
Una de las mejores generaciones de rookies, según apuntan los expertos , no está pudiendo brillar por estos infortunios del baloncesto. Marcus Smart o Julius Randle (el último será baja para el resto de temporada), son algunos ejemplos de rookies que no han podido disputar varios partidos por lesión.