Los Hornets vencieron a los Heat en un apretado duelo entre dos equipos de la División Sureste donde los de Carolina del Norte lograron frenar el intento de remontada visitante a tiempo y ponerse a tan solo medio partido del séptimo puesto de la Conferencia Este, ocupado por los Heat. El conjunto de Erik Spoelstra jugaba su segundo partido seguido en la segunda noche de su back-to-back y contaba con las bajas del alero titular Luol Deng (enfermedad) y del pívot titular y revelación Hassan Whiteside (esguince de tobillo). Ambos jugadores jugaron el partido frente a los Thunder donde los de South Beach cayeron por 86 a 94. Ante las bajas, Danny Granger y Chris Andersen completaban el quinteto titular. Este quinteto es el 17º que ha utilizado Spoelstra durante la temporada debido a las frecuentes lesiones y esto ha provocado que el conjunto de Florida aún no haya encontrado la estabilidad necesaria para desplegar su mejor baloncesto. En los locales, Kemba Walker volvía a las pistas tras dos partidos de baja por unos problemas en la rodilla.
De vuelta a los 70s
El primer cuarto marcó el tono que predominó durante todo el encuentro. Ambos equipos tenían problemas para anotar y la anotación brillo por su ausencia. Los Heat abrían el marcador con una rápida suspensión de Dwyane Wade. La primera canasta de los Hornets llegó tras más de dos minutos transcurridos. Gerald Henderson y Kemba Walker lideraban a los Hornets y los problemas a la hora de cerrar el rebote lastraban a los visitantes. Wade lideraba a los visitantes y un 2+1 suyo ponía los Heat por delante (11-10) a falta de 5:40.
Los Heat continuaban fallando tiros y una bandeja de Lance Stephenson daba a los locales una ventaja de seis puntos (17-11). Chalmers cogió el relevo anotador de Wade y ambos sostenían a los Heat en el marcador. Los suplentes locales, liderados por Stephenson y Al Jefferson daban a los de Carolina del Norte una renta de ocho puntos al final del primer período (25-17). Steve Clifford mantuvo la rotación que ha provocado que los Hornets hayan ganado ocho de sus últimos diez partidos y desde la vuelta de Jefferson y Stephenson de sus lesiones, el técnico ha decidido que sus dos estrellas salgan desde el banquillo hasta que cojan el ritmo de competición.
Durante el segundo cuarto ambos conjuntos continuaban teniendo problemas para anotar. Los Heat cometían pérdidas innecesarias y eran obligados a tiros forzados gracias a la buena defensa local. Los hombres de Clifford se aprovechaban del rebote ofensivo y castigaban la pintura de los Heat, que con la baja de Whiteside volvía a estar falta de centímetros. Una suspensión de Bosh y un triple de Shawne Williams ponían a los Heat a tan solo cuatro puntos (28-32). Un mate de Biyombo culminaba un parcial de 10-2 que daba a los locales una ventaja de diez puntos (40-30) a falta de tres minutos para el descanso. Los Heat se mantenían en el partido y una canasta de Henderson ponía el 45-39 con el que ambos equipos me marchaban a los vestuarios.
Remar para morir en la orilla
El tercer cuarto comenzó para los visitantes de la misma manera que los dos anteriores. Tras un triple de Walker, ambos equipos intercambiaron canastas. Miami seguía teniendo problemas a la hora de cerrar el rebote y una bandeja de Biyombo ponía a los Hornets nueve arriba a falta de 4:20 para el último período. La defensa local provocaba malos ataques de los Heat y la circulación de balón del equipo de Spoelstra era nula. Cuatro puntos seguidos de Kidd-Gilchrist y un 2+1 de Biyombo hacían que los Hornets se marcharan hasta los dobles dígitos (64-53). Una canasta de James Ennis ponía a los de Florida a diez puntos con tan solo el último período por jugarse (65-55).
El último cuarto comenzó con otro ritmo para el equipo de South Beach. Los Heat conseguían un parcial de 9-2 y un triple de Shawne Williams ponía a los visitante a tres puntos con solo dos minutos transcurridos. Los Hornets tenían problemas para anotar pero conseguían mantener la ventaja por encima de los tres puntos. Bosh volvía al partido y los Heat continuaban engraciados de cara al aro. Con cuatro abajo a falta de más de cuatro minutos para el final del partido, dos triples de los Heat (Bosh y Chalmers) daban a los de Florida el liderato por primera vez desde el primer cuarto (74-72).
Con el liderato ya recuperado los Heat volvieron a tener problemas para anotar y los malos tiros se sucedían. Los Hornets recuperaban el marcador a base de tiros libres y Kemba Walker daba a los locales una ventaja de tres puntos a 23 segundos del final. Bosh anotó en la siguiente posesión y Walker anotó uno de sus dos tiros libres. A 12 segundos del final y tan solo dos abajo, Bosh fallaba un triple y Chalmers que había conseguido el rebote ofensivo en lugar de buscar el empate buscó el triple para ganar y también falló. Los Hornets se hacían con la victoria por 78-76.
A pesar de la baja anotación, por parte de los locales destacaron Kemba Walker (15 puntos, a pesar de una pésima noche en el tiro, 4/17), Kidd-Gilchrist (ocho puntos y 14 rebotes), Al Jefferson (12 puntos) y Bismack Biyombo (12 puntos y 12 rebotes). En el conjunto visitante debido a las bajas y al cansancio de haber jugado la madrugada anterior, solo rindieron a buen nivel Dwyane Wade (17 puntos y siete rebotes), Chris Bosh (17 puntos y siete rebotes) y Mario Chalmers (13 puntos).