Houston Rockets derrotó en el Toyota Center a Denver Nuggets por 118-108. El partido sirvió para honrar la reunión que tuvieron los que fueron campeones con los Rockets en 1994 y 1995.
¡Vaya homenaje!
La atmósfera era de celebración. Los únicos campeones de la historia de los Rockets cumplían 20 años de aniversario, y los Rockets decidieron que este partido sería el ideal para celebrarlo. Y vaya si fue así.
Buen inicio de ambos equipos. La sobriedad de Terrence Jones era muy productiva en los primeros minutos, justo hasta que se lesionó en las costillas a los ocho minutos de juego. Por parte de los de Colorado, Kenneth Faried era la referencia por la que siempre pasaba el balón pero había buenas aperturas para los hombres exteriores. Mucha anotación, poco parón, pero el marcador favorecería a los locales por 33-27 al término del primer parcial.
Con Jones fuera para lo que restaba de partido, minutos para que Josh Smith jugara de ‘4’ y Trevor Ariza le acompañara en la posición de ‘3’. Y fue un trato favorecedor para ambos, ya que fueron foco anotador que acompañara al universo paralelo que suponía James Harden. Los Nuggets lo seguían peleando con tiros de tres puntos y media distancia bajo la dirección de Ty Lawson, pero empezaba a acusar los bombardeos texanos y se quedaban atrás en el marcador. Al descanso, 65-49.
(Fuente: Twitter / @HoustonRockets)
El partido estaba en el alambre, en ese momento en el que no sabes si se va a romper definitivamente y va a haber menos espectáculo o si va a continuar habiendo pelea y oposición. Con el derroche de cualidades que estaba haciendo Harden parecía lo primero, era un continuo fluir de puntos por todas las vías posibles. Pero los Nuggets tuvieron arrojo y siguieron insistiendo, con Wilson Chandler y Randy Foye como sus jugadores más acertados. Los visitantes achicaron agua y sólo cedieron un punto en el tercero: 90-73.
Pese a la poca aportación de su banquillo, uno de los banquillos más productivos de la liga, los Nuggets estaban encontrándose mejor. La relajación del equipo local también ayudaba, claro. Fueron reduciendo diferencias hasta bajarlas a los diez en los últimos instantes. Ahí vino una de las jugadas del encuentro: Harden, sabedor de lo que estaba logrando, enchufó un triple desde la esquina y en caída a cuarenta segundos del final para llegar a redondear con 50 puntos una actuación magnífica. Así se llegaba al final, con 118-108 en el marcador.
Los Rockets siguen en la pelea
Si bien no están totalmente descartados para playoffs, les falta poco. Los Nuggets se van de Texas con 26-43, muy lejos del corte que está marcando el octavo puesto en la Conferencia Oeste. Además, han perdido los cuatro encuentros que han jugado esta temporada frente a los Rockets.
Por parte de Houston, siguen bien colocados y en la pelea por la ventaja de campo para playoffs. Su balance es de 46-22. Y, en cuanto a Harden, caso aparte: los 50 puntos son su mejor marca en la NBA hasta ahora; es el primero en anotar 50 puntos como jugador de Rockets desde Olajuwon (1996), se une a Olajuwon, Malone y Hayes como únicos jugadores de Rockets en hacer un partido de 50 puntos y 10 rebotes; entró al partido siendo el jugador activo con más partidos de 40 puntos [11] que nunca -hasta este momento- había anotado 50 puntos; es el primero que anota 20 tiros libres en un partido desde que él mismo lo hiciera en 2013. Sideral.